Sevilla,
1 de febrero de 2006.- Con motivo de la celebración
del Día Mundial de los Humedales, WWF/Adena
presenta un nuevo informe, realizado por la Universidad
de Huelva, sobre los efectos del cambio climático
en Doñana. La investigación ofrece
una serie de propuestas para mitigar el impacto
del calentamiento global y favorecer la adaptación
al cambio del clima de los ecosistemas y de la economía
de la Comarca.
WWF/Adena ha lanzado hoy en Sevilla
su nuevo informe “Doñana y cambio climático:
propuestas para la mitigación de los efectos”,
encargado por la organización a expertos
de la Universidad de Huelva. El objetivo de este
documento es dar a conocer las consecuencias negativas
del cambio climático sobre este espacio y
ofrecer una serie de propuestas para mitigar sus
efectos y favorecer la adaptación del entorno
a la alteración del clima. El análisis
de los impactos no se ha centrado sólo en
la conservación de áreas protegidas,
sino que ha considerado Doñana como un todo
en el que tanto los ecosistemas como la economía
se verán afectados por el cambio climático.
El estudio de WWF/Adena revela
que durante este siglo va a producirse un proceso
de aridificación. Es decir, las temperaturas
medias diarias van a subir en torno a los 3-4ºC,
además de aumentar el período de verano
entre 2 y 5 semanas, junto a los días cálidos
y las noches tropicales. De igual modo, disminuirán
los días de lluvia y se estima que habrá
un descenso de hasta 110 mm de agua al año.
Por otro lado, el aumento del nivel del mar en el
área de Doñana puede llegar a 0,5
metros, lo que agravará los procesos erosivos
en la costa. Asimismo, se espera una tendencia a
la desertificación, con caídas de
los aportes superficiales en la cuenca del Guadalquivir,
entre otros efectos.
Conscientes de lo que depara el
futuro, resulta más fácil diseñar
las herramientas necesarias y poner en marcha diferentes
medidas que ayuden a adaptarse o a paliar estos
impactos. Además de la prioridad de reducir
las emisiones de CO2 para prevenir un impacto aún
mayor, uno de los pilares para WWF/Adena es el ahorro
de agua. Este ahorro, especialmente para uso agrícola
(ya que consume un 80% del agua utilizada en la
Comarca), se convierte en un paso imprescindible
a la hora de enfrentarse a la reducción del
agua disponible que se producirá en el futuro.
Los expertos de WWF/Adena mantienen
que hay que restaurar los ecosistemas para que cumplan
sus funciones y evitar así nuevos impactos.
En el caso de Doñana, es necesario continuar
con las actuaciones de restauración de la
marisma (proyecto Doñana 2005) y ampliarlas
para asegurar la recuperación de hábitats
diversos y la funcionalidad de los arroyos como
corredores que conecten Doñana con otras
zonas naturales. WWF/Adena insiste en que es esencial
coordinar estas restauraciones y otras actuaciones
de gestión de ríos y humedales con
acciones equivalentes para el acuífero, ya
que el agua superficial y subterránea están
íntimamente ligadas en Doñana.
Por último, WWF/Adena exige
que se estudie en detalle los efectos del cambio
climático en el río Guadalquivir en
el marco del proyecto “Actuaciones de mejora en
accesos marítimos al Puerto de Sevilla”,
lo cual no se hizo en los estudios presentados por
el Puerto de Sevilla para la aprobación de
la Declaración de Impacto Ambiental. Según
WWF/Adena, de ejecutarse el actual proyecto, la
biodiversidad del Guadalquivir y su estuario se
vería afectada por las consecuencias del
cambio climático al no haberse tenido este
en cuenta: la disminución del agua dulce,
el aumento de la salinidad, los cambios en la temperatura,
etc.
Mar Asunción, Responsable
del Área de Cambio Climático de WWF/Adena,
declaró: “Es imprescindible que las políticas
y planes de gestión para Doñana y
su entorno incluyan medidas de prevención
y adaptación al cambio climático”.
Y concluye: “El cambio climático progresa
a tal velocidad que pronto será demasiado
tarde para aplicar medidas preventivas”.