Madrid, 21 de noviembre de 2006-
Nueve organizaciones han denunciado ante la Fiscalía
Especial de Medio Ambiente y los Juzgados de Ávila
las ilegalidades que propiciaron el grave caso de
especulación urbanística de la “Ciudad
del Golf”.
El Juzgado de Instrucción
Nº 2 de Ávila investigará el
conjunto de ilegalidades e irregularidades cometidas
en el trámite administrativo del proyecto
de macrourbanización “Ciudad del Golf” en
Las Navas del Marqués (Ávila), que
han sido denunciadas por las organizaciones Centaurea,
CC.OO. de Ávila, WWF/Adena, SEO/BirdLife,
Amigos de la Tierra, Greenpeace, Ecologistas en
Acción de Castilla y León, Cantueso
y Grama. Estas nueve organizaciones presentaron
el lunes 13 de noviembre una denuncia de los hechos
ante la Fiscalía Especial de Medio Ambiente
y Urbanismo y ante el Juzgado de Instrucción
Nº 2 de Ávila, el cual la ha admitido
por Providencia del pasado martes día 14.
El análisis realizado por
estas nueve organizaciones de los acontecimientos
administrativos que forzaron la aprobación
de la citada “Ciudad del Golf” en una zona medioambientalmente
protegida, ha ofrecido una amplia variedad de conductas
que presentan indicios suficientes para impulsar
la redacción de una denuncia penal. Se ha
considerado que podrían haberse cometido
acciones constitutivas de una pluralidad de delitos:
contra la ordenación del territorio, prevaricación,
tráfico de influencias, falsedad documental,
contra la protección de la fauna, o malversación
de caudales públicos.
El proyecto de la “Ciudad del
Golf”, promovido por Residencial Aguas Nuevas, S.L.
consiste en la construcción de 1.600 viviendas,
varios hoteles y cuatro campos de golf, entre otras
instalaciones, en un pinar protegido perteneciente
a la Red Natura 2000 de la Unión Europea
y refugio de la cigüeña negra, en peligro
de extinción, entre otras especies. Una reciente
sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla
y León ha impedido la realización
de esta urbanización, al declarar como “no
urbanizable de protección natural” el suelo
donde ésta pensaba erigirse. A pesar de ello,
y tras conocer la sentencia, el promotor de la “Ciudad
del Golf”, Francisco Gómez “El Paloma”, inició,
con la pasividad del Ayuntamiento de las Navas del
Marqués y de la Junta de Castilla y León,
la tala de miles de pinos a principios de octubre,
talas que fueron paralizadas gracias a la actuación
de la Fiscalía Especial de Medio Ambiente
y Urbanismo, que dirige Antonio Vercher.
La “Ciudad del Golf” empezó
con la creación, el año 2000, de una
sociedad anónima (Montes de las Navas, S.A.)
destinada a la compraventa de terrenos; en que todos
sus socios y fundadores son Administraciones Públicas
(70% el Ayuntamiento de las Navas del Marqués,
20% la Junta de Castilla y León y 10% la
Diputación Provincial). Por lo tanto, Montes
de las Navas contaba con representantes en todas
la Administraciones competentes. La sociedad Montes
de las Navas, S.A. sería la plataforma desde
la que se habría diseñado un sistema
de especulación urbanística, al margen
del objeto que movió a la Junta de Castilla
y León a participar, según recoge
el Decreto 66/2000, por el que se pretendía:
«... la protección de los terrenos
del monte del municipio de Las Navas del Marqués,
a través de diversos campos, con especial
atención a la conservación del medio
ambiente.»
Los documentos estudiados, de
las diferentes fases del proyecto, demuestran que
la decisión de ejecutar la “Ciudad del Golf”
se tomó con carácter previo a cualquier
tipo de adecuación y encaje en las normas
ambientales y urbanísticas; es decir, de
forma autónoma y en la idea de que tenía
que llevarse a término con independencia
de cualquier otro condicionante. Desde la determinación
que favorecía el que todos los integrantes
de Montes de Las Navas, S.A. formasen parte de las
Administraciones competentes para su tramitación
(Ayuntamiento, Diputación, y Junta de Castilla
y León). Así, respecto a los posibles
responsables, se pone de manifiesto que llegaron
a intervenir hasta en tres órganos decisorios
en varios momentos de la tramitación: en
la sociedad Montes de Las Navas, en el Ayuntamiento
y en la Comisión Provincial de Urbanismo.
En el ámbito medioambiental,
donde ya el Tribunal Superior de Justicia (TSJ)
de Castilla y León ha fallado la quiebra
de la legalidad anulando la modificación
realizada en las normas urbanísticas de Las
Navas del Marqués, respecto al sector SUZD-4
(lugar donde pensaba construirse esa macrourbanización),
es de destacar la “transigencia” observada por la
Consejería de Medio Ambiente (que también
ostenta puestos de consejeros en la sociedad Montes
de Las Navas). No consta que ésta hiciese
valer los imperativos legales de protección
impuestos por las propias normas de la Junta de
Castilla y León, al punto de que no se encuentra
el informe que preceptivamente y vinculantemente
debía elaborar, y para el que fue requerido
específicamente, sobre el impacto del proyecto
en el hábitat de la cigüeña negra.
Con carácter previo a la
adjudicación a Residencial Aguas Nuevas S.L.,
del proyecto de la “Ciudad del Golf”, se efectuaron
negociaciones privadas con el promotor, en las que
se llegó a suscribir un “preacuerdo de compraventa”;
del que resultaron decisivas sus prescripciones
para el pliego del posterior concurso, en el cual
evidentemente resultó beneficiaria Residencial
Aguas Nuevas. Además, el contrato de compraventa
consiguiente, añadió una cláusula
penal –no contemplada en el concurso- que perjudicaba
con más de 3.000.000 € a la sociedad Montes
de Las Navas, en el caso de que no fuese viable
el proyecto.
Cuestiones a las que se añaden
una gruesa lista de acciones injustas, como haber
pactado recalificaciones de terrenos en escrituras
de compraventa por la sociedad Montes de Las Navas,
para después forzarlas en las instituciones
públicas por los propios consejeros.
Artículo: Luis Suárez