Madrid,
15 de enero de 2006.- WWF/Adena pide al Ministerio
de Industria que no otorgue ningún permiso
para investigar hidrocarburos en el valioso Mar
de Alborán, sin las evaluaciones de impacto
ambiental exigidas por la legislación. Según
la organización, dichas actividades podrían
causar graves daños sobre especies y hábitats
prioritarios.
El pasado 23 de diciembre, el
BOE publicó una resolución de la Dirección
General de Política Energética y Minas
en la que se anunciaba la solicitud de 4 permisos
de investigación de hidrocarburos en el Mar
de Alborán, por parte de la petrolera canadiense
CNWK Oil.
No es la primera vez que se conceden
este tipo de permisos por parte del Ministerio de
Industria, Turismo y Comercio sin que se elaboren
evaluaciones de impacto ambiental sobre el daño
que estas actividades causan en el medio marino.
Las prospecciones de búsqueda de gas y petróleo
frente a las costas de Fuerteventura y Lanzarote
o frente a las costas de Málaga en el Mar
de Alborán son los últimos casos más
polémicos.
WWF/Adena se opone a la adjudicación
de estos permisos. El área afectada destaca
por la presencia de hábitats de interés
comunitario como arrecifes y bancos de arena, así
como poblaciones de delfín mular (Tursiops
truncatus), rorcual común (Balaenoptera physalus)
y tortuga boba (Caretta caretta), especies prioritarias
para la Directiva 92/43/CEE, sobre la conservación
de los hábitats naturales y de la flora y
fauna silvestres.
Los 4 sectores se hallan junto
a varios Lugares de Importancia Comunitaria (LIC).
En concreto, el LIC ES6170002 Acantilados de Maro-Cerro
Gordo, LIC ES6140016 Acantilados y fondos marinos
de la Punta de la Mona, LIC ES6140013 Fondos marinos
Tesorillo-Salobreña y LIC ES6140014 Acantilados
y fondos marinos de Calahonda-Castell de Ferro.
Por otra parte, estas zonas merecen ser incluidas
dentro de red Natura 2000. Así, lo ha recogido
WWF/Adena en su propuesta de espacios protegidos
(Conservando nuestros paraísos marinos: Propuesta
de Red Representativa de Áreas Marinas Protegidas
en España) dentro de las Montañas
submarinas y Conos Volcánicos de Alborán.
Según WWF/Adena, la normativa
europea, estatal y autonómica vigente obliga
a que estas actividades sean sometidas a evaluación
ambiental ya que los permisos de investigación
de hidrocarburos producen en sus diferentes fases
un grave efecto en el medio marino. Diversos estudios
señalan que las emisiones acústicas
de las prospecciones tienen un fuerte impacto sobre
los cetáceos y la pesca. Entre las especies
más susceptibles, están las grandes
ballenas, como el rorcual común, ya que usan
bajas frecuencias para comunicarse—coincidiendo
con los rangos utilizados por las prospecciones.
Según Juan Carlos del Olmo,
Secretario General de WWF/Adena, “España
debería tener una política de apoyo
a la eficiencia energética y a las renovables,
en vez de invertir en buscar nuevos recursos fósiles
cuya combustión nos alejaría de nuestros
compromisos con Kioto”. Y añadió:
“El Ministerio de Industria tendría que cumplir
la legalidad y someter a evaluación ambiental
el procedimiento de concesión de los permisos
para que se conozcan sus incidencias sobre la biodiversidad
marina y los ciudadanos puedan manifestar su opinión”.
Artículo: José L. García Varas