04 enero
2007 - Buenos Aires, Argentina — Greenpeace reclamó
hoy el inicio, en forma urgente, de un diálogo
bilateral entre Argentina y Uruguay, para encontrar
una solución al conflicto por la construcción
de la pastera Botnia en Fray Bentos y ante la escalada
en la protesta derivada de la decisión de
la Asamblea de Gualeguaychú de bloquear la
Terminal portuaria de Buenos Aires.
Asimismo, Greenpeace aclaró
que si bien considera legítimo el reclamo
de los asambleístas contra la instalación
de la pastera, no comparte la forma de protesta
decidida y no participa ni participará de
las acciones anunciadas por la Asamblea de Gualeguaychú.
“La impericia de los gobiernos en el manejo de esta
situación ha llevado a los asambleístas
a tomar una decisión que no compartimos,
porque se trata de una metodología que perjudica
en forma indiscriminada a personas ajenas a la situación
y que en lugar de acercarlos el objetivo buscado,
aleja la posibilidad del diálogo bilateral,
única vía de solución posible”,
sostuvo Paula Brufman, coordinadora de la Campaña
contra la Contaminación de Greenpeace.
La organización ambientalista
recordó también que desde el inicio
del conflicto ha procurado una discusión
a fondo sobre el problema de la producción
de pasta celulósica tanto en la Argentina
como en el Uruguay y la adopción de criterios
comunes para el futuro e inevitable desarrollo de
la industria en la región.
Según se estima, la demanda mundial de pasta
celulósica en 2020 será de 556 millones
de toneladas al año, lo que exigirá
instalar dos plantas de alrededor de un millón
de toneladas anuales para poder cubrir las necesidades
de los productores de papel.
Greenpeace sigue demandando la adopción de
criterios ambientalmente sustentables para la industria
de la pasta celulósica y el papel que permitan
evitar conflictos sociales, políticos y catástrofes
ambientales y que puedan ser adoptados y desarrollados
por ambos países, con el propósito
de modernizar las obsoletas y ambientalmente deficitarias
plantas existentes, tanto en la Argentina como en
el Uruguay, y establezcan pautas que deberán
cumplir las nuevas inversiones.