Sevilla,
23 de febrero de 2007- WWF/ Adena, SEO/BirdLife,
Greenpeace y Ecologistas en Acción han criticado
hoy en rueda de prensa la mala gestión de
la Agencia Andaluza del Agua que utiliza el discurso
ambientalista sin llevarlo a la práctica
e incluso está incumpliendo la Directiva
Marco del Agua. Los ecologistas han hecho un repaso
a la situación de las aguas dos años
después de la puesta en marcha de la Agencia
Andaluza del Agua y han pedido a la Junta de Andalucía
que cambie su política hídrica y favorezca
la conservación de los ecosistemas, la sostenibilidad
de las inversiones, una mejor gestión de
los recursos y una mayor transparencia.
Los ecologistas han denunciado
que la política andaluza del agua es obsoleta,
va en contra de la conservación de los ecosistemas
acuáticos y no sigue los preceptos de la
nueva Directiva Marco del Agua. De hecho, la agencia
todavía no ha entregado ningún texto
con los objetivos ambientales de la política
andaluza del agua, tal y como se comprometió
en marzo de 2006. Además, el Plan Andaluz
de Humedales está pendiente de aprobación
desde 2002.
Los principales problemas
Las cuatro organizaciones han
hecho un repaso a los principales problemas del
agua en la Comunidad. Los ríos andaluces
sufren graves problemas de vertidos de aguas residuales
sin depurar. El 30% de los municipios de entre 15.000
y 100.000 habitantes carecen de depuradora, en el
resto un gran número de instalaciones funcionan
mal. El 50 % de las aguas residuales urbanas e industriales
de la cuenca del Guadalquivir no se depura. En la
cuenca Mediterránea es el 32%.
El escaso control sobre los recursos
subterráneos está poniendo en peligro
el abastecimiento urbano y áreas protegidas
como el Parque Nacional de Doñana. No debemos
olvidar que los acuíferos son las mejores
reservas estratégicas de agua, porque no
son tan sensibles a las sequías como los
embalses. Sólo en las cuencas del Guadalquivir
y Mediterránea Andaluza el 25% y el 22% de
los acuíferos respectivamente están
contaminados con niveles de nitratos superiores
a los 50mg/l (límite máximo marcado
por la Directiva 91/676). Además, la mayoría
de los acuíferos costeros están sobreexplotados
debido a la fuerte presión que ejercen sobre
ellos los regadíos, las urbanizaciones y
los campos de golf.
Incumplimiento de las
directivas europeas
La Agencia Andaluza del Agua estudia
actualmente eximir a los regantes de la obligación
de pagar el precio real del agua que consumen. La
propuesta supondría subvencionar el agua
a los empresarios agrarios y a cambio gravar más
a los usuarios domésticos. De esta forma,
los regantes quedarían eximidos de pagar,
entre otros, los costes de construcción y
funcionamiento de las infraestructuras, los costes
ambientales y de oportunidad. Esta medida incumple
los planteamientos de la Directiva Marco del Agua.
Además, el Consejo Andaluz
del Agua sigue siendo hoy el único órgano
de participación con un funcionamiento irregular
e inoperante, donde apenas existe debate. De hecho,
el borrador del nuevo Decreto que regulará
la participación pública en las cuencas
andaluzas vuelve a relegar a las organizaciones
ecologistas en favor de los regantes. En el Comité
de Gestión de los Recursos de la Cuenca ni
siquiera se prevé la incorporación
de representantes de las organizaciones ambientales
aunque sí entran por primera vez los del
sector turístico.
Las organizaciones ambientales
reconocen que desde su creación, el 1 de
enero de 2005, la Agencia ha tenido un efecto positivo
en la concienciación sobre el valor del agua
y de los ríos y ha promovido un mayor control
sobre los usos urbanos del agua, en especial el
riego de jardines y el llenado de piscinas en la
Costa del Sol. Igualmente, la Consejería
de Innovación ha contribuido a controlar
la propagación de nuevos pozos ilegales a
través de una Orden aprobada en junio.
Artículo: Guido Schmidt