Bogotá, 27 de agosto
de 2007. (MAVDT) - En momentos en que el mundo
entero sufre los efectos ocasionados por el
Calentamiento Global,
Colombia recibió una buena noticia
por parte de la ONU, la primera certificación
de reducción de emisiones de gases
de efecto invernadero (GEI), por parte del
proyecto Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL)
en la Central Hidroeléctrica Santa
Ana de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado
de Bogotá.
Este complejo se construyó
entre los años 2001 y 2003 para producir
energía eléctrica aprovechando
la caída de agua que viene por túneles
desde la Planta Wiesner en La Calera hasta
el Tanque de Santa Ana en el norte de la ciudad.
En el proceso de generación
eléctrica, cercana a los 7 megavatios,
Santa Ana reducirá -en el transcurso
de 10 años- más de 200 mil toneladas
de gases de efecto invernadero a la atmósfera
al desplazar el uso de fuentes fósiles
como carbón y gas utilizados para la
generación de energía en Colombia.
Luego de ser aprobado por
el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo
Territorial, por su contribución al
desarrollo sostenible y a la mitigación
del cambio climático, el proyecto Santa
Ana se presentó ante la Junta Ejecutiva
del MDL de Naciones Unidas, quien certifica
las reducciones, en el marco del Protocolo
de Kyoto, el cual registró oficialmente
a la Central Hidroeléctrica de Santa
Ana, como proyecto de Mecanismo de Desarrollo
Limpio.
El Ministerio de Ambiente,
Vivienda y Desarrollo Territorial viene impulsando
el desarrollo de proyectos de Mecanismo de
Desarrollo Limpio en el país, que traen
consigo además de una importante contribución
a la disminución de emisiones de gases
de efecto invernadero, la inversión
extranjera y desarrollo sostenible para las
regiones, así como actualización
tecnológica en los diferentes sectores
productivos.
En lo corrido del año
2007 se han firmado 4 acuerdos de compraventa
de reducción de emisiones entre proyectos
colombianos y compradores de reducciones de
países con compromisos en el marco
del Protocolo de Kyoto.
Uno de estos acuerdos por
7.2 millones de euros fue firmado entre la
CAF e Ingenio Providencia un proyecto de sustitución
de combustibles que reemplazará el
uso de carbón por biomasa, un proyecto
forestal en las sabanas de Córdoba
entre Banco Mundial y CVS-CIAT-CORPOICA por
1 millón de dólares, otro por
la reducción 100.000 toneladas de CO2
equivalente entre Banco Mundial y la Empresa
Procesadora de Mieles Furatena, el cual es
un proyecto de eficiencia energética
en el sector panelero tradicional y el último
firmado entre CORNARE y Banco Mundial el proyecto
forestal San Nicolás por 1 millón
de dólares.
Por otra parte, el portafolio
de proyectos colombianos elegibles al Mecanismo
de Desarrollo Limpio, supera ya los 100 proyectos,
gran parte de los cuales esta relacionado
con el desarrollo de proyectos energéticos
como Santa Ana, el cual es el proyecto más
adelantado del sector que por su estructuración
y la destinación que se le va a dar
a conservación, se convierte en un
proyecto bandera que debe ser replicado en
Colombia y el mundo.
“Esto representa un aporte
muy grande de la empresa de Acueducto de Bogotá
para el medio ambiente, esto se va a lograr
mediante la inversión de unos equipos
que harán que el proceso sea más
eficiente”, afirmó el ministro de Ambiente,
Vivienda y Desarrollo Territorial, Juan Lozano
Ramírez.
De esta forma, el Acueducto
de Bogotá se convierte en la primera
empresa de servicios públicos del país
en obtener la certificación de reducción
de emisiones GEI por parte de la Junta Ejecutiva
de MDL.
“El medio ambiente, la conservación
de nuestras riquezas naturales, las fuentes
y nacimientos de agua, el conjunto del Parque
Nacional Natural Chingaza, sin duda, tienen
el gran beneficio de la aplicación
de esta inversión y los habitantes
de la ciudad de Bogotá que garantizarán
por esta vía inversiones para proteger
la sostenibilidad de agua, los habitantes
de los municipios vecinos de Cundinamarca
también tendrán un beneficio
en que se invertirán recursos que favorecen
su condición de vida”, dijo el jefe
de la Cartera Ambiental.
AL MERCADO DE SERVICIOS
AMBIENTALES
La aplicación de
mecanismos de desarrollo limpio le permitirá
al Acueducto de Bogotá vender, durante
10 años, cerca de 206 mil certificados
de emisiones reducidas de gases efecto invernadero
a los países desarrollados, los cuales
se comprometieron, a través del Protocolo
de Kyoto, a reducir estas emisiones en un
5 por ciento en promedio por debajo del nivel
de emisiones presentados en el año
11000.
Esta es una nueva incursión
de una empresa del sector público colombiano
en los mercados internacionales a través
de la venta de servicios ambientales derivados
del Protocolo de Kyoto.
Se espera que el Acueducto
de Bogotá obtenga cerca de 7 mil millones
de pesos que servirán para apoyar inversiones
en protección, restauración
y conservación del Parque Nacional
Natural Chingaza, zona de donde se surte el
70 por ciento del agua potable que consume
la ciudad de Bogotá y de donde proviene
el agua que utiliza la Central Santa Ana para
generar energía.
BOGOTÁ CADA VEZ MÁS
AMBIENTAL
Con base en la primera experiencia
obtenida con Santa Ana, el Acueducto de Bogotá
iniciará el proceso de licitación
en el mes de septiembre de tres nuevos proyectos
de generación de energía limpia
en Ventana (Sistema Chingaza), Suba y Usaquén,
que además de contribuir con la preservación
del medio ambiente permitirán junto
con Santa Ana generar más del 98 por
ciento de la energía que consume la
empresa en todos sus procesos operativos y
técnicos, además de convertir
al Acueducto en la empresa ambiental líder
en Latinoamérica.
EJEMPLO PARA COLOMBIA Y
EL MUNDO
En carta al Gerente de la
Empresa de Acueducto, Edgar Antonio Ruiz Ruiz,
el Ministro Juan Lozano sostiene: “Quiero
felicitarlo y, a través suyo a la Empresa
de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá,
por la reciente expedición de los 23.960
certificados de reducción de emisiones
(CER’s) de gases efecto invernadero en virtud
del proyecto hidroeléctrico de Santa
Ana, que por ser el primer proyecto unilateral
MDL en el país, obtendrá el
mejor precio del mercado internacional del
carbono...”.
ASÍ FUNCIONA SANTA
ANA
La Central Santa Ana aprovecha
el salto disponible de 105.9 metros, entre
la Planta de Tratamiento Francisco Wiesner,
ubicada en el Municipio de la Calera sobre
el Embalse de San Rafael, y el Tanque de Almacenamiento
de Santa Ana, localizado al norte de Bogotá,
en la localidad de Usaquén.
Diseñada para un
flujo de agua de 13.5 m3/s, Santa Ana cuenta
con una capacidad instalada de 13.43 MW, que
podría permitirle generar 90 GWh/año,
y utiliza una turbina Francis para producir,
con agua tratada, energía eléctrica
limpia que entrega a la Red del Sistema Interconectado
Nacional.
La Central Santa Ana empezó
a operar en junio de 2005 y su periodo de
acreditación de 10 años como
Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) inició
el 1 de agosto de ese año. Como MDL
se estima que puede generar una reducción
total de 206,424 toneladas de dióxido
de carbono equivalente, durante los 10 años
de acreditación del proyecto, considerando
una generación anual esperada de 47
GWh.