09 mayo 2008 - DF, México
— Consenso de más de 40 organizaciones
en el Foro de “Bioseguridad Alimentaria”:
rechazan el avance del establecimiento de
disposiciones jurídicas para autorizar
la siembra del grano contaminao en México
Ante la inminente aprobación
del Régimen de Protección Especial
al Maíz sin salvaguardas para preservar
los centros de origen de este importante grano
en México, más de 40 organizaciones
entre las que destacan ANEC, UNORCA y la Central
Campesina Cardenista, agrupaciones civiles,
ambientalistas, académicas, de derechos
humanos y estudiantes, rechazaron el avance
del establecimiento de disposiciones jurídicas
para autorizar la siembra de maíz transgénico
en México.
Las organizaciones llegaron
a un acuerdo de 12 puntos al concluir el Foro
“Bioseguridad Alimentaria frente a la siembra
de maíz transgénico” al que
convocaron las organizaciones Fomento Cultural
y Educativo, Greenpeace, el Grupo de Estudios
Ambientales y Semillas de Vida.
Hay que destacar que sorpresivamente,
después de dos años de retraso,
el pasado 19 de marzo se publicó en
el Diario Oficial de la Federación
el Reglamento de la Ley de Bioseguridad de
Organismos Genéticamente Modificados
(LBOGM). Los comentarios que diversas organizaciones
realizaron a este documento no fueron tomados
en cuenta y aún cuando se había
solicitado la difusión de su contenido,
de acuerdo con los órganos de consulta
obligatoria establecidos en la Ley, éste
fue un misterio hasta su publicación.
Ya se ha dicho en múltiples foros y
en los medios de comunicación que jurídicamente
este Reglamento es inviable.
Posteriormente, la Secretaría
de Agricultura puso a consulta pública
el Anteproyecto del Acuerdo por el que se
establecen las disposiciones jurídicas
relativas a la bioseguridad que forman parte
del Régimen de Protección Especial
del Maíz, necesarias para resolver
las solicitudes de permisos de liberación
al ambiente de maíz genéticamente
modificado.
Las organizaciones que participaron
en este Foro, cuestionaron estas disposiciones
porque no constituyen un verdadero Régimen
de Protección Especial del Maíz
que preserve a México como centro de
origen y de diversidad genética, y
sólo responden a los intereses de las
corporaciones agrobiotecnológicas urgidas
por liberar sus semillas transgénicas
al ambiente.
Ante este contexto desfavorable
para los maices criollos o nativos, así
como para la gran mayoría de productores
y consumidores, las organizaciones reunidas
en este foro llegaron al consenso en torno
a los siguientes puntos:
1. Moratoria a liberación
al ambiente del maíz transgénico
en México en todas sus modalidades
(experimental y/o comercial).
2. Declaración de
todo el territorio nacional como centro de
origen y diversidad genética del maíz.
3. Declaración de
los maices nativos y criollos como patrimonio
de todos los mexicanos.
4. Establecimiento de programas
y apoyos para la conservación de las
razas y variedades de maíz y la creación
de bancos comunitarios de semillas.
5. Establecimiento de un
sistema de biomonitoreo y de medidas para
revertir la contaminación trangénica.
6. Investigación
independiente de resultados en países
con cultivos transgénicos para determinar
la acumulación de transgenes en cultivos
tradicionales.
7. Llamado a la Comisión
para la Cooperación Ambiental de América
del Norte (CCAAN) para que dé seguimiento
a sus recomendaciones formuladas en 2004,
de moratoria a la siembra y a la importación
de maíz transgénico en México.
8. Garantía y vigilancia
de la distribución de granos de maíz
por parte de Diconsa para que sean libres
de transgénicos.
9. Destitución de
todos los funcionarios públicos que
tengan conflicto de interés en materia
de bioseguridad de transgénicos.
10. Establecimiento de mecanismos
para vigilar y responsabilizar a los funcionarios
públicos que toman decisiones contrarias
al interés público.
11. Defensa de los derechos
de los consumidores a la información
y a la libre elección mediante un etiquetado
riguroso de todos los productos que contengan
transgénicos.
12. Respeto a los compromisos
internacionales firmados por el gobierno mexicano
en materia de biodiversidad, bioseguridad
y derechos humanos.
Las organizaciones reunidas
hicieron un llamado a todas las agrupaciones
de la sociedad civil interesadas en la defensa
del maíz y de la soberanía alimentaria
de México, a sumar esfuerzos para impedir
que los transgénicos acaben con los
centros de origen de nuestro país.
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rechaza aprobar dos maíces transgénicos
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de la UE es cuestionada por la Comisión
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tuvo lugar ayer
08 mayo 2008 - España
— La trascendental decisión que ayer
tomó la Comisión Europea de
no aprobar tres controvertidos transgénicos
y de devolverlos a la Autoridad Europea de
Seguridad Alimentaria (EFSA en sus siglas
inglesas) para que vuelva a evaluar en profundidad
su seguridad es un claro voto de no-confianza
en el sistema europeo de aprobación
de transgénicos.
Este hecho arroja serias
dudas sobre la capacidad de la EFSA para evaluar
la seguridad de los cultivos transgénicos.
La Comisión ha pedido
a la EFSA que revise:
- la opinión previamente
emitida acerca de la seguridad de la patata
modificada genéticamente, a la luz
de las preocupaciones manifestadas por instituciones
como la Organización Mundial de la
Salud, el Instituto Pasteur y la Agencia Europea
del Medicamento. La patata transgénica,
producida por la compañía agroquímica
alemana BASF, contiene un gen que hace que
determinados microorganismos se hagan resistentes
a ciertos antibióticos que son de gran
importancia para la salud humana y animal.
- la anterior evaluación
de dos variedades de maíz que ha sido
modificado para producir pesticidas. A pesar
de la gran controversia científica
acerca de estos transgénicos modificados
genéticamente para producir un pesticida,
la EFSA en un principio estableció
que ambas variedades eran seguras. Posteriormente
EFSA reconoció que no tenía
capacidad para llevar a cabo la evaluación
de los efectos ambientales indirectos y a
largo plazo, requerida por la ley. El mes
pasado, la Comisión acordó que
la EFSA necesitaría dos años
para desarrollar la capacidad de valorar estos
impactos indirectos y a largo plazo de los
transgénicos.
Amigos de la Tierra y Greenpeace
reclaman que se reforme la EFSA, para garantizar
que sus opiniones sean científicamente
válidas e imparciales. La EFSA tiene
un déficit de recursos humanos y de
experiencia para llevar a cabo sus obligaciones
legales en relación con la evaluación
de riesgo de los transgénicos en Europa.
“El resultado del debate
de ayer es un claro voto de no-confianza de
la Comisión en la EFSA. La pregunta
ahora es cuantas veces Barroso ignorará
las evidencias científicas y la opinión
pública hasta conseguir la decisión
que él espera. Pedir una evaluación
de la seguridad de estos cultivos, por tercera
vez, a una agencia europea inadecuada y con
financiación deficiente, es como poner
al zorro al cuidado de las gallinas”, ha afirmado
Juan-Felipe Carrasco, responsable de campaña
de transgénicos de Greenpeace.
“Los comisarios han hecho
lo correcto al rechazar las opiniones de la
EFSA en relación a los tres cultivos,
pero han errado al no tomar una clara decisión
sobre los dos maíces pesticidas. Dadas
las serias preocupaciones científicas
ligadas a estos cultivos, el dossier debería
haber sido rechazado ayer en lugar de retrasar
dos años más el proceso. La
Agencia necesita una reforma completa si se
le van a confiar importantes juicios de valor
sobre la seguridad de los cultivos transgénicos”,
ha afirmado David Sánchez-Carpio, Responsable
del Área de Agricultura y Alimentación
de Amigos de la Tierra.
+ Más
¿Puede la comisión
Europea dar marcha atrás en el callejón
sin salida de los transgénicos?
05 mayo 2008 - España
— Después de meses de expectación
y negociaciones, la Comisión Europea
va a mostrar si es capaz o no de sacar a la
Unión Europea del callejón sin
salida en el que se encuentran los transgénicos
y promover una reforma en la política
europea de transgénicos. Esto ocurrirá
en el debate que tendrá lugar el próximo
miércoles 7 de mayo.
Con las moratorias efectivas
contra el cultivo de Organismos Modificados
Genéticamente (OMG) en seis países
de la Unión Europea, las repetidas
críticas de la Organización
Mundial del Comercio por los retrasos en los
procesos de autorización y los nuevos
datos europeos que expresan la oposición
pública a los transgénicos,
hay una gran presión sobre la Comisión
para reformar la política europea de
transgénicos .(1) Recientes llamamientos
de los estados miembros para mantener un debate
similar en el Consejo han forzado a que la
UE revise su sistema, basado en la confianza
ciega en los datos de la industria.
La Comisión está
contra las cuerdas y tiene que hacer frente
a sus responsabilidades”, ha afirmado Juan-Felipe
Carrasco, responsable de la campaña
de transgénicos de Greenpeace.
La Comisión persiste
en esconderse detrás de las opiniones
malinformadas de la Autoridad Europea de Seguridad
Alimentaria (EFSA en sus siglas en inglés).
“La Comisión no debe pasar una vez
más la pelota a la EFSA, sino ocuparse
de las críticas que comunidad científica
y estados miembros emiten contra esta Autoridad”,
ha añadido Carrasco.
Después de meses
de aplazamientos, el Presidente de la Comisión
Europea José Manuel Barroso convocó
repentinamente este debate con sólo
dos semanas de antelación , y solamente
informó a los Comisarios con dos días
lectivos de antelación (2).
Los comisarios no han tenido
el tiempo adecuado para prepararse para el
debate. Barroso tendrá que asumir toda
la responsabilidad si no es capaz de garantizar
que todos los Comisarios están implicados
verdaderamente en el debate”, dijo Carrasco.
Greenpeace pide a la Comisión
que:
Reforme la EFSA mediante
el incremento de sus ingresos y la contratación
de científicos a tiempo completo y
provenientes de un amplio rango de campos
científicos y garantizando que los
estudios de la EFSA no se basen en exclusiva
en los datos que proporciona la industria
agroquímica, sino también en
datos de investigaciones independientes.
Respete la legislación
de manera que no se autoricen productos transgénicos
hasta que los organismos científicos
de la UE puedan dar evaluaciones fiables,
tal y como requiere la ley; tome en cuenta
todas las evidencias científicas disponibles
a partir de organismos científicos
internacionales reconocidos así como
los factores sociales, económicos y
ambientales.
Notas al editor:
(1) – Las moratorias están en Francia,
Austria, Italia, Polonia, Hungría y
Grecia. Recientemente, Rumanía se sumó
a la lista anunciando la moratoria en que
la decisión final será tomada
por una Comisión de Bioseguridad formada
por el Gobierno rumano.
- Ver p.66 del Eurobarómetro
de marzo de 2008:
http://ec.europa.eu/environment/barometer/pdf/report2008_environment_en.pdf
(2) Los temas específicos para la discusión
son
- Los maíces Bt11
y 1507 : dos maíces productores de
pesticidas. Desarrollados por Syngenta y Dupont.
Los estudios demuestran una incertidumbre
científica sobre sus efectos ambientales.
- La patata BASF ‘Amflora’.
Una patata que contiene un gen que confiere
resistencia a ciertos antibióticos.
La OMS, la Agencia Europea del medicamento
y el Instituto Pasteur están en desacuerdo
con la EFSA acerca del posible impacto de
este producto sobre la salud humana y el medioambiente.