25°
Consejo de Administración / Foro Mundial
de los Ministros de Medio Ambiente del 16
al 20 de febrero 2009
PNUMA - El informe encargado
destaca como las inversiones ambientales pueden
lograr que las economías nacionales
y globales vuelvan a ser un trabajo sostenible
25o Consejo de Administración
/ Foro Mundial de los Ministros del Medio
Ambiente
del 16 al 20 de febrero
Nairobi, 16 de febrero de
2009-Un tercio de los paquetes previstos de
incentivos, estimados en $ 2.5 trillones,
deberían ser invertidos con el fin
de “enverdecer” la economía mundial.
Esto ayudaría a impulsar
a la economía mundial fuera de la recesión
y hacia un camino “Verde”, del siglo 21, según
dice un nuevo informe publicado hoy por el
Programa de Naciones Unidas para el Medio
Ambiente-PNUMA.
La inversión verde
estimada en unos $ 1000 billones, equivalente
a cerca del 1% del actual PIB mundial, podría
favorecer significativos, múltiples
y potencialmente transformadores beneficios.
Unidos a nuevos mecanismos
de mercado y políticas fiscales, estos
incluyen:
Estimulo a la innovación
en tecnología limpia, estabilización
y reactivación del empleo en puestos
de trabajo decentes y protección a
grupos vulnerables.
Corte en la dependencia
al carbono y en la emisión de los gases
de efecto invernadero, reducir la degradación
de ecosistemas valuadas en trillones de dólares
y de sus bienes y servicios y afrontar la
escasez de agua.
Fomento a la oportunidad
de alcanzar el Objetivo de Desarrollo del
Milenio de poner fin a la pobreza extrema
para el 2015.
El G 20, que comprende las 20 mayores economías
desarrolladas y en desarrollo, quienes tendrán
su próxima reunión en Londres
durante el mes de abril, será la primera
oportunidad para comenzar a dar forma al “Nuevo
Acuerdo Ecológico Global".
Dicho
Acuerdo también podrá sentar
las bases para el éxito de la crucial
Convención de la ONU sobre Cambio Climático
que se estará realizando a fines de
este año en Copenhague, Dinamarca.
Estas son algunas de las
conclusiones que se encuentran en el informe
del “Nuevo Acuerdo Ecológico Global”,
escrito en consulta con expertos de más
de 25 organismos de las Naciones Unidas y
de organizaciones externas como la OCDE, el
Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
El informe, Un Nuevo Acuerdo
Ecológico Global, encargado en nombre
de la Iniciativa por una Economía Verde
del PNUMA, fue escrito por el Profesor Edward
B. Barbier de la Universidad de Wyoming.
El Profesor Barbier es uno
de los principales expertos en Economía
de la Sostenibilidad, y co-autor con el fallecido
Prof. David Pearce, del famoso Modelo de Referencia
para una Economía Verde.
Sus conclusiones, junto
con las del Anuario del PNUMA 2009, se presentan
hoy a más de 100 ministros del medio
ambiente que están asistiendo al Consejo
de Administración del PNUMA / Foro
Ambiental Mundial a Nivel Ministerial.
Achim Steiner, Sub Secretario
de las Naciones Unidas y Director Ejecutivo
del PNUMA, dijo: "Los $ 2,5 a $ 3 billones
de dólares que se movilizarán
durante los próximos 24 meses para
hacer frente a la crisis económica
son sumas casi impensables 12 meses atrás".
"Utilizado de manera
sensata y creativa, ofrecen la oportunidad
de hacer frente a la actual crisis inmediata
y de comenzar la elaboración de una
respuesta a aquellas crisis que se encuentran
en el horizonte, desde una futura escasez
de alimentos, escasez de recursos naturales,
seguridad energética y cambio climático",
añadió.
El informe del "Nuevo
Acuerdo Ecológico Global, parte de
la Iniciativa para una Economía Verde
del PNUMA, está siendo presentada aquí
a los ministros del Norte y del Sur como un
antídoto a las actuales dificultades
económicas. Representa una oportunidad
para avanzar hacia sociedades dirigidas por
la innovación, de baja emisiones de
carbono y de bajos residuos de la Economía
Verde, con perspectivas de empleo decente
para más miles de millones de personas
", dijo el Sr. Steiner.
"Varias economías,
como Estados Unidos, China, la República
de Corea, Japón, Alemania, Dinamarca,
Francia y el Reino Unido ya están destinando
parte de sus miles de millones de dólares
a paquetes de estímulo para inversiones
ecológicas. Este informe está
diseñado para darse a conocer en debate
público y tal vez ayudar a quienes
están inseguros de cómo proceder
para que ellos también conviertan crisis
en oportunidad ", añadió.
El Sr. Steiner enfatizó:
"Esta agenda - esta locomotora para el
desarrollo sostenible - es relevante tanto
para las economías en desarrollo y
emergentes como para las industrializadas.”
"Volver ecológica
a la economía es tanto sobre volver
verde la ayuda al desarrollo en el exterior,
la asistencia bilateral y multilateral, la
cooperación Sur-Sur y la inversión
extranjera directa, tanto como la inversión
nacional.”
Pavan Sukhdev, Jefe de Proyecto
de la Iniciativa para una Economía
Verde del PNUMA, transferido del Deutsche
Bank temporalmente, dijo: "El informe
del Profesor Barbier es el tercero en nuestro
continuo flujo de trabajo de repensar los
modelos económicos y enfocarnos en
metas de crecimiento del empleo en un mundo
en donde el aprovechamiento del "Capital
Natural" es al mismo tiempo una limitante
creciente y a su vez una oportunidad sin explotar,
y en donde no lograr un desarrollo sostenible
ya no es una opción ".
Agregó que el nuevo
informe basado en dos informes anteriores
- el Informe Provisional sobre la Economía
de los Ecosistemas y la Biodiversidad (TEEB)
publicado en mayo de 2008 y una iniciativa
del G8 +5 y el Informe de Empleos Verdes de
septiembre de 2008.
"Ahora ‘El Nuevo Acuerdo
Verde Global’ transmite esta forma de pensar
sobre la actual crisis económica, con
especial atención en los paquetes de
reactivación monetaria que están
siendo preparados para solucionarlo. Muestra
cómo los componentes "verdes"
de los paquetes de incentivos, junto con cambios
adecuados en las políticas, pueden
utilizarse para restaurar el crecimiento del
empleo y lograr una "economía
verde" más sostenible”, dijo.
El Sr. Sukhdev añadió
que el nuevo informe demuestra que "enfocarse
simultáneamente en el logro de los
tres objetivos de: creación de empleo;
reducción de los riesgos climáticos
y ecológicos; reducción de la
pobreza, no sólo es posible sino también
deseable y oportuno".
"Este informe trata
los desafíos para los países
desarrollados y en desarrollo. Reconoce que,
en una economía mundial globalizada
en grave recesión, los pobres y los
vulnerables son los más afectados,
y hace sugerencias útiles para prevenir
el empeoramiento de la pobreza ", dijo.
Sobre la base de consultas
con los gobiernos en los próximos días
en el GC del PNUMA, la Iniciativa de Economía
Verde redactará el borrador de recomendaciones
específicas para la aplicación
de un "Nuevo Acuerdo Verde Global".
El informe de hoy de 154
páginas del Nuevo Acuerdo Ecológico
Global esboza un amplio abanico de opciones
y medidas a disposición de los países
en distintos puntos de sus caminos económicos
y de desarrollo, algunos de los cuales pueden
emprenderse a nivel nacional y otros en cooperación
a nivel regional y mundial.
El informe muestra que algunos
países a nivel nacional ya exceden,
alcanzan o llegan a una proporción
del uno por ciento del objetivo sugerido.
La República de Corea
Cita que más de $ 36 billones de dólares
del Nuevo Acuerdo Ecológico de la República
de Corea, que en virtud de la plena aplicación,
supone una inversión aproximada del
3 por ciento del PIB y un potencial de creación
de empleo de cerca de un millón de
puestos de trabajo.
"La conservación
de la energía y las inversiones en
construcción verde que forman parte
del Nuevo Acuerdo Ecológico de la República
de Corea, ascienden a 0,5 por ciento del PIB
y las estrategias totales de bajas emisiones
de carbono representan el 1,2 por ciento del
PIB", dice el informe.
Estas estrategias por sí
solas esperan crear más de 180, 000
y más de 330.000 puestos de trabajo,
respectivamente.
Por ejemplo:
Los $ 7 billones a ser invertidos
en transporte público y ferrocarriles
en los próximos tres años, probablemente
generaran 138.000
Los $ 5,8 billones en la
conservación de la energía en
las aldeas y escuelas; 170,000 puestos de
trabajo.
Otra parte de los incentivos
también crearán empleo, incluyendo
más de $ 10 billones para la restauración
de ríos; aproximadamente 200.000 puestos
de trabajo.
Los más de $ 1,7
billones en incentivos para la restauración
de bosques; más de 130,000 puestos
de trabajo.
Los $690 millones para incentivar la gestión
de los recursos hídricos; más
de 16,000 puestos de trabajo.
Se prevé que China
gastara $ 586 billones o un poco más
del 8% de su PIB en un paquete de estímulo
fiscal, de los cuales un estimado de $ 140
billones o un poco menos de 2% será
destinado a inversiones verdes.
El paquete de inversión
verde de China probablemente impulsará
aún más al sector de las energías
renovables de $ 17 billones que ya emplea
a alrededor de un millón de personas.
El paquete de incentivos
de los Estados Unidos, aprobado por el Congreso
hace unos días, asciende a $ 1000 billones
o alrededor del 5,7 por ciento del PIB de
los cuales $ 100 billones (basado en estimaciones
sobre el nuevo paquete) o más de 0,7
por ciento se dirigirán hacia volver
verde la economía de los Estados Unidos.
$ 18 billones para agua
potable, control de inundaciones y restauración
ambiental y $ 8,4 billones para el tránsito,
además de $ 8 billones para la red
ferroviaria de alta velocidad.
$ 4,5 billones para hacer edificios de oficinas
federales con mayor eficiencia energética.
$ 30 billones para una red eléctrica
inteligente, tecnología de avanzada
para baterías y otras medidas de eficiencia
energética.
$ 20 billones en incentivos fiscales para
energía renovable y eficiencia energética
en los próximos 10 años.
$ 6,3 billones para eficiencia energética
en las viviendas multifamiliares que reciben
asistencia federal, como el patrocinio-HUD
para la vivienda de bajos ingresos y $ 5 billones
para climatizar más de 1 millón
de viviendas propiedad de familias con "modestos
ingresos".
El informe cita un estudio
realizado por el Instituto Peterson de Economía
Internacional y del Instituto Mundial de Recursos
quienes estiman que las inversiones en energía
verde en los Estados Unidos podrían
ahorrar a la economía un promedio de
450 millones de dólares al año
por cada mil millones invertidos.
Y que cada mil millones
del gasto público en este ámbito
creará alrededor de 30.000 empleos
por año y reducirá las emisiones
anuales de gases con efecto invernadero en
unas 600.000 toneladas entre el 2012 y el
2020.
El informe del Nuevo Acuerdo
Ecológico insta a todos las economías
de altos ingresos de la OCDE a factorizar
el uno por ciento de sus objetivos en inversión
verde dentro de sus paquetes de incentivos.
El informe también recomienda que las
restantes economías de altos ingresos,
junto con las de medianos ingresos del G-20,
“en la medida de lo posible” inviertan cantidades
similares en planes de acción nacional
para reducir la dependencia al carbono y estimular
la sostenibilidad ambiental—el G-20 se reunirá
en Abril en Londres.
Las restantes economías en desarrollo
deberían también considerar
inversiones para reducir la dependencia al
carbono. Aunque las cantidades necesitan ser
fijadas, el informe reclama que tales inversiones
pueden asistir en la reducción de la
pobreza, generación de empleo y mejoras
en los salarios.
Escindiendo subsidios a
los combustibles-y limites y comercio del
mercado de carbono
El informe dice que los
gobiernos de los países en desarrollo
podrían obtener parte de los recursos
financieros necesitados a través de
la reducción o eliminación de
los subsidios a la energía.
En el presente un estimado
de $300 o más billones están
siendo gastados en subsidios a la energía
en países desarrollados y en desarrollo,
la mayoría en subsidios al desarrollo
de combustibles fósiles.
Por mucho la mayor cantidad es usada por países
desarrollados, con subsidios en 20 países
que no pertenecen a la OECD, totalizando $220
billones.
“Cancelando estos subsidios reduciría
de por si las emisiones de gases de efecto
de invernadero globalmente por un 6% y sumaría
un 0.1 % al GDP global,” dice el informe.
“Los ahorros financieros
podrían también ser redirigidos
a inversiones en energía limpia, desarrollo
de energía renovable y conservación
de energía, al mismo tiempo mejorando
las economías y el empleo,” agrega.
El informe cita reformas
del sector energético en varias economías
de bajos ingresos, incluyendo Botswana, Ghana,
Honduras, India, Indonesia, Nepal y Senegal
que también han beneficiado hogares
pobres.
Aquí cada dólar
invertido en mejorar la eficiencia energética
en la generación de electricidad ha
llevado al ahorro de hasta $3.
El informe opone la idea
de que la energía renovable es la conservación
de las economías ricas. Pequeñas
hidroeléctricas, biomasa y fotovoltaicas
solares están ya proveyendo de electricidad,
calefacción, bombeo de agua y otras
funciones para millones de personas en zonas
rurales de los países en desarrollo.
25 millones de hogares en
países en desarrollo ahora usan biogás
para cocinar y generar luz y 2.5 millones
de hogares en países en desarrollo
ahora usan paneles solares para generar luz.
Contrario a la creencia
popular, las economías en desarrollo
comprenden el 40% de la capacidad existente
de los recursos de energía renovable
global, 70% de la capacidad de calentadores
de agua solares y 45% de la producción
de bio combustibles.
“La expansión de
estos sectores existentes (en parte redirigiendo
subsidios de los combustibles fósiles)
no solo transformará a los servicios
de energía sustentable en más
accesibles y económicos para los pobres
del mundo, pero también proveerá
las muy necesitadas (frecuentemente locales)
oportunidades de empleo,” dice el informe
del Nuevo Acuerdo Ecológico Global.
El informe también
recomienda que las economías en desarrollo
destinen 1% de su GDP a mejorar la provisión
de agua potable y servicio sanitario para
los pobres en línea con las recomendaciones
del Programa para el Desarrollo de las Naciones
Unidas.
Un dólar invertido
en agua potable y sistemas sanitarios en países
en desarrollo da retornos de entre $5 y $11
y en algunos casos hasta de $28 por algunas
medidas de costos bajos – los beneficios incluyen
menor cantidad de faltas al trabajo o a la
escuela, reducción de costos para los
servicios locales de salud y reducción
de costos en medicinas como resultado de enfermedades
transmitidas por el agua como la diarrea.
El crecimiento económico
mundial por reducir a la mitad para el 2015
el número de personas sin acceso al
agua potable y servicio sanitario sería
de alrededor de $38 billones anualmente.
Solamente en África
Subsahariana, el estímulo sería
de $15 billones anualmente equivalente a alrededor
del 60% de los ingresos por asistencia corrientes.
El informe declara que la
actual crisis económica, que está
reduciendo el comercio internacional y puede
llevar a una reducción en los flujos
de ayuda e inversión, exige una respuesta
más focalizada para poder maximizar
los beneficios.
“Atendiendo el bache en
la asistencia, en agua potable y sistemas
sanitarios en las economías en desarrollo,
debe ser una prioridad de la comunidad internacional
dentro del Nuevo Acuerdo Ecológico
Global.”
El informe hace una serie
de recomendaciones adicionales para poder
alcanzar el Nuevo Acuerdo Ecológico
Global y lograr el crecimiento de la Economía
Verde.
Todas las economías
deberían considerar eliminar los subsidios
al agua y adoptar instrumentos de libre mercado
para aumentar la eficiencia en el uso del
agua, instrumentando medidas para asegurar
la protección de grupos vulnerables,
junto con la mejor gobernanza de ríos
y lagos compartidos.
La adopción de planes
nacionales de acción por economías
en desarrollo para mejorar la sostenibilidad
de actividades de producción primarias.
El informe cita el caso
de Malasia donde los índices de crecimiento
anuales han excedido el 4% gracias a la inversión
del 25% de las ganancias financieras de los
sectores de forestería y pesca en diversificar
la economía; educación y entrenamiento;
sistemas sociales de seguridad y otras medidas
destinadas a la gente de bajos recursos.
También llama a los
grupos como el G-20 a que apoyen el crecimiento
de la Economía Verde, teniendo en cuenta
la baja en ayuda humanitaria y comercio como
resultado de la crisis económica junto
con la baja en la inversión privada.
Otras acciones que el informe
sugiere en el nivel internacional incluyen:
El foro mundial más
probable para promover acción internacional
urgente en el Nuevo Acuerdo Ecológico
Global (GGND por sus siglas en inglés)
es el foro G-20 de las 20 economías
más grandes y emergentes, aunque todo
foro internacional, y el sistema de las Naciones
Unidas especialmente, tienen un rol a jugar
en promover, desarrollar y mejorar el Nuevo
Acuerdo Ecológico Global.
En su reunión de abril de 2009 en Londres,
el G-20 debería considerar propuestas
para un Nuevo Acuerdo Ecológico Global,
como las acciones recomendadas por este informe,
y ayudar a desarrollar ideas estructurales
para asegurar un acuerdo global de cambio
climático en Copenhagen, en diciembre
del 2009.
La comunidad internacional
debería llegar a un acuerdo en extender
los CDM más allá de 2012 como
parte del acuerdo global de cambio climático,
y reformar el mecanismo para incrementar la
cobertura de las economías en desarrollo,
los sectores y tecnologías y el financiamiento
general global de la reducción de emisiones
de los gases de efecto invernadero.
La comunidad internacional
debería apoyar los esfuerzos para mejorar
el pago de servicios ambientales destinados
a los sectores de bajos recursos e incluir
más ecosistemas, y esfuerzos para mejorar
la gobernanza y uso compartido de los recursos
hidrográficos.
La comunidad internacional
debería adoptar lo antes posible reformas
a la gobernanza del sistema financiero que
incrementen la transparencia y simplicidad,
y mejorar la configuración de la estructura
de incentivos.
Los donantes de ayuda bilateral
y multilateral deberían incrementar
su asistencia para el desarrollo en los próximos
años, y concentrarse en los sectores
y acciones que coincidan con los componentes
claves de Nuevo Acuerdo Ecológico Global.
La comunidad internacional
debería desarrollar y expandir mecanismos
de financiamiento innovadores, como el Internacional
Finance Facility, Climate Investment Funds
y Global Clean Energy Cooperation, como instrumentos
posibles para financiar los componentes fundamentales
del Nuevo Acuerdo Ecológico Global.
La comunidad internacional
debería desarrollar y expandir nuevo
financiamiento para el comercio y paquetes
facilitadotes de financiación, y utilizarlos
para enfocar el apoyo en el Nuevo Acuerdo
Ecológico Global
La comunidad internacional debería
revisar los acuerdos comerciales existentes
y diseñar futuros acuerdos identificando
y minimizando barreras para mejorar el apoyo
eficiente a acciones del Nuevo Acuerdo Ecológico
Global.
La comunidad internacional
necesita arribar a una conclusión exitosa
en las negociaciones comerciales de la ronda
de Doha, especialmente en subsidios a la pesca,
tecnología y servicios limpios y la
reducción al proteccionismo agrícola.
Notas para los editores
El informe del Nuevo Acuerdo
Ecológico Global, escrito por el profesor
Ed Barbier, fue beneficiado por amplias consultas
llevadas a cabo en la sede de Nueva York,
el 2-3 de febrero con expertos entre otros
del European Environmental Agency, ICTSD,
ILO, IMF, OECD, UNCEB, UNCSD, UNCTAD, UNDESA,
UNDP, UNECE, UNEP, UNECLAC, UNESCAP, UNFAO,
UNFCCC, UNIDO, UNSD, del World Bank y de la
oficina del secretario General de las Naciones
Unidas.
Una reunión consultiva
también se llevo a cabo en la UN Foundation,
Washington DC, el 4 de febrero de 2009 con
expertos, entre otros, del Center for American
Progress, Pew Center on Global Climate Change,
Union of Concerned Scientists, UN Foundation,
World Resources Institute and the Worldwatch
Institute.
El informe completo y su
resumen ejecutivo pueden ser leídos
en www.unep.org o en http://www.unep.org/greeneconomy/
La vigésimo quinta
reunión del Consejo de Administración/
Foro Mundial de los Ministros del Medio Ambiente
del PNUMA http://www.unep.org/gc/gc25/
Nick Nuttall, vocero del PNUMA, Oficina del
Director Ejecutivo