Posted on 31 mayo 2010
La reunión de
las Naciones Unidas sobre Clima que comienza
hoy en Bonn (Alemania), así como las
Cumbres del G8 y del G20 que tienen lugar
a lo largo del próximo mes, pueden
convertirse en una oportunidad para alcanzar
un Tratado que acelere la transición
hacia un futuro bajo en carbono. Según
WWF, junio será decisivo para encaminar
los esfuerzos hacia un futuro que salve el
clima.
"El mes de junio es
determinante para la política climática
después de un período de confusión
y reflexión desde Copenhague",
ha dicho Kathrin Gutmann, Responsable de la
Política sobre Clima de la Iniciativa
Climática Global de WWF.
Copenhague no sirvió
para sellar el Tratado que el mundo necesita,
pero estuvo muy cerca de consensuar los aspectos
cruciales que debería incluir. Por
ello, Bonn debe comenzar las negociaciones
donde Copenhague las dejó, para avanzar
en México en los temas ya tratados
a finales de año.
Según WWF, los negociadores
en Bonn pueden impulsar algunos debates importantes
que están a punto de cerrarse, como
por ejemplo la protección forestal
gracias a la subvención al carbono
– el llamado REDD-. También deben insistir
en una nueva financiación para lograr
una economía baja en carbono y que
permita la recuperación del clima en
los países en vías de desarrollo.
"Estamos muy cerca de llegar a un acuerdo
para detener la deforestación y conseguir
luchar contra el cambio climático a
través de la adaptación",
afirma Gutmann.
Continuar en esta línea
en temas de deforestación en la cumbre
de México en diciembre situaría
bien al mundo para incluir dichos elementos
clave en un acuerdo global en la próxima
cumbre de Sudáfrica en 2011. Esta es
la fecha tope para alcanzar un Tratado sobre
Clima, ya que el Protocolo de Kioto necesita
un nuevo periodo de vigencia a partir de 2012.
Asimismo, WWF pide que se
solucione el gran problema de la reducción
de las emisiones, ya que existe un desajuste
masivo entre los niveles prometidos por los
países en el Acuerdo de Copenhague
y los que realmente se necesitan para la recuperación
climática futura.
“Los países ganarán
este gran desafío si potencian la transición
hacia una economía baja en carbono,
solucionan las escapatorias legales que debilitan
sus planes de acción nacionales y trabajan
de forma conjunta para extender sus esfuerzos
de transformación hacia nuevas fuentes
emisoras que aún no están reguladas”,
sostiene Gutmann.
El éxito de México,
que permitirá olvidar el fracaso de
Copenhague, también dependerá
de la inversión que se destine al clima.
Por ello, es imprescindible poner todas las
miradas en las reuniones del G8 y G20 que
tendrán lugar durante el mes de junio
en Canadá.
Los jefes de estado deben
identificar las nuevas fuentes de financiación,
como los impuestos sobre transacciones financieras
o los aranceles sobre emisiones de sectores
no regulados, entre ellos, el marítimo
y la aviación. También tendrán
que debatir sobre el cambio de las subvenciones,
para que se pase de las destinadas a la quema
de combustibles fósiles a otras que
potencien las tecnologías energéticas
innovadoras. Es necesarios aunar las agendas
económicas y ambientales para conseguir
un futuro bajo en carbono.
WWF considera que hay que
aprovechar al G8 y al G20, para que movilicen
fondos con el objetivo de promover un desarrollo
limpio. Además, las conversaciones
de Bonn tienen que solventar las dificultades
y lograr el clima de confianza perdido tras
el desastre de la pasada cumbre climática
de Copenhague en diciembre.
+ Más
Según WWF, la UE
no contempla la sostenibilidad ambiental para
reducir la pobreza en el mundo
Posted on 31 mayo 2010
A dos semanas de la celebración de
la Cumbre de la Unión Europea de junio,
WWF considera preocupante que la sostenibilidad
ambiental no esté reconocida dentro
del Plan de Acción de la UE, teniendo
en cuenta que es uno de los ocho pilares de
los mencionados objetivos. En esta reunión
de los Jefes de Estado europeos se aprobará
la posición comunitaria en relación
a los Objetivos de Desarrollo del Milenio
antes de la cumbre de alto nivel de la ONU
que tendrá lugar en septiembre de 2010.
Cada año, la UE destina
unos 100 euros por ciudadano a la ayuda al
desarrollo en el exterior, lo que refleja
la opinión del 72% de los europeos
que están a favor de cumplir o aumentar
los actuales compromisos de ayuda a los países
en desarrollo. Por este motivo, cuando sólo
quedan cinco años para 2015, fecha
en la que deben lograrse los Objetivos de
Desarrollo del Milenio, la UE debe volver
a evaluar la importancia que tienen los recursos
naturales para el desarrollo, especialmente
a la luz del análisis de fondo elaborado
en los documentos de trabajo de la UE. En
este informe se enumeran las conclusiones
extraídas y la necesidad de contar
con un ecosistema sano para garantizar el
crecimiento económico y alcanzar los
Objetivos de Desarrollo del Milenio.
La naturaleza y los servicios
que esta proporciona de forma gratuita constituyen
la columna vertebral del desarrollo humano.
La biodiversidad es esencial para garantizar
la seguridad alimentaria e hídrica,
así como la protección frente
a desastres naturales. Por el contrario, su
destrucción implica la pérdida
de la productividad pesquera, forestal y agrícola.
Además, desaparece la fertilidad del
suelo y los recursos de agua dulce. Más
de mil millones de personas en los países
en desarrollo dependen de la pesca como principal
fuente de alimento y, sin embargo, el 80%
de los recursos pesqueros mundiales se encuentran
explotados al máximo de sus capacidades
o sobreexplotados.
“1.400 millones de personas,
casi tres veces la población europea,
viven en la pobreza y se acuestan cada noche
sin comer. Los recursos naturales de la tierra
y el mar proporcionan a las personas de todo
el mundo los elementos básicos necesarios
para desarrollarse y sobrevivir. No obstante,
estos recursos naturales están siendo
destruidos y degradados, lo que hace que la
consecución de los Objetivos de Desarrollo
del Milenio sea prácticamente imposible”,
comenta Sally Nicholson, encargada de Desarrollo
y Relaciones Internacionales para la UE de
la Oficina de Políticas Europeas de
WWF. Y añade: “Es vital que se dupliquen
las inversiones actuales destinadas a conservar
la biodiversidad”.
El cambio climático
también representa una enorme amenaza
para el logro de los Objetivos de Desarrollo
del Milenio, ya que quienes viven en países
en desarrollo, incluidos los estados formados
por pequeñas islas, tienen una probabilidad
79 veces mayor de sufrir un desastre relacionado
con el cambio climático que alguien
en un país rico. En el Plan de Acción
de la UE sólo se menciona una mejor
coordinación de la financiación
inmediata para el cambio climático,
lo que en sí mismo es insuficiente.
El cambio climático y la pérdida
de la biodiversidad son dos hechos interconectados
que necesitan ser abordados conjuntamente
con el fin de proporcionar soluciones de mitigación
del cambio climático y de su adaptación.
“Con el fin de conservar
la biodiversidad, a la vez que se reduce la
pobreza y se mejora el bienestar y el desarrollo
de las personas, las preocupaciones ambientales
deben integrarse en todas las principales
áreas políticas, como el cambio
climático. Y también en las
principales estrategias económicas
y de desarrollo. La UE debe reconocer el imperativo
que supone lograr la sostenibilidad ambiental
internacional mediante la cooperación
al desarrollo y actuaciones externas”, concluye
Sally Nicholson.
+ Más
WWF y ECODES piden la aprobación
inmediata de la etiqueta energética
para los televisores
Posted on 28 mayo 2010
Las televisiones más eficientes son
las que tienen tecnología LED, ya que
consumen un 25% menos de electricidad que
las LCD convencionales, y un 40% menos que
las de plasma. Para que la información
al consumidor de estos productos sea transparente,
WWF y ECODES consideran imprescindible que
se apruebe la etiqueta energética para
los televisores este verano. Con motivo del
próximo Mundial de Fútbol, ambas
ONG dan a conocer los modelos más eficientes
del mercado.
WWF y ECODES demandan que
se apruebe de forma urgente la nueva etiqueta
energética europea para las televisiones.
Esta normativa se sumaría a la Directiva
de Ecodiseño (1), que establece los
requisitos mínimos de diseño
ecológico aplicables a estos aparatos.
Las televisiones más
eficientes que hay actualmente en el mercado
son LCD con retroiluminación LED, que
consumen un 25% menos electricidad que las
LCD convencionales – con lámparas fluorescentes
– y un 40% menos que las de plasma. Algunas
de las marcas que ofrecen los televisores
más eficientes del mercado son, por
ejemplo, Sharp, Samsumg, Philips o Sony, como
se muestra en la web www.eurotopten.es.
WWF y ECODES recuerdan que
la tecnología para hacer televisores
más eficientes ya es una realidad.
Lo que hace falta ahora es facilitar las condiciones
para que estos productos estén presentes
en el mercado y que desplacen a los de mayor
consumo. También es imprescindible
informar y orientar al consumidor para que
se decanten por ellos. Con este objetivo,
las organizaciones exigen que la propuesta
actual de etiquetado energético para
los televisores sea adoptada e implementada
este verano.
La eficiencia energética
de los televisores está aumentando
rápidamente gracias a la dinámica
del mercado y al desarrollo tecnológico.
Sin embargo, no se puede obviar que la gente
tiende a comprar pantallas cada vez más
grandes, lo que incrementa notablemente el
consumo de energía de estos aparatos.
En los próximos días,
ante el Mundial de Fútbol, se espera
que muchos hogares españoles reemplacen
su viejos televisores. En este sentido, elegir
uno de los modelos más eficientes del
mercado recomendados en www.eurotopten.es
significaría un gran beneficio para
el clima. Por ejemplo, si España jugara
la final y unos 15.000.000 de hogares españoles
vieran el partido en su nuevo televisor eficiente,
se ahorraría una media de 640.800 euros
en la factura de la luz, en comparación
a si hubieran elegido un modelos de mayor
consumo energético. Esto significaría
evitar la emisión de 933 toneladas
de CO2 durante la celebración de la
Final del Mundial de Fútbol, el equivalente
a 184 coches que recorrieran una media de
25.000 km.
A través de los proyectos
europeos www.coolpructs.eu y www.eurotopten.es,
ECODES y WWF promueven el ahorro energético
y la adquisición de productos más
eficientes. Con esta iniciativa, se unen a
los esfuerzos de otras ONG ambientales europeas
que también están presentando
estos días sus televisiones eficientes,
en países como Francia, Alemania, Bélgica,
Eslovenia y Holanda.