Reportaje
- junio 21, 2010
En medio de fuertes presiones para reabrir
la caza comercial de ballenas y el escándalo
por la compra de votos a favor de esta medida,
inicia hoy en Agadir, Marruecos, la 62ª
reunión de la Comisión Ballenera
Internacional (CBI), en la que 88 países
miembros van a decidir si continúa
o no la moratoria a la captura de cetáceos,
vigente desde 1986.
Esta cumbre está envuelta en polémicas.
La primera, que durante años se ha
sabido que Japón compra los votos a
favor de la caza de ballenas de numerosos
países. El 13 de junio de este año
esa noticia fue publicada en el periódico
británico The Sunday Times y se confirmó
que Japón compra votos para la Comisión
Ballenera Internacional a través de
vuelos, mujeres y dinero. Las grabaciones
de reuniones con funcionarios para que voten
a favor de la caza de ballenas en todo el
mundo revelan el secreto tan bien guardado
por Japón de sus operaciones de compra
de votos, que Japón ha negado durante
décadas. Además, abren serias
dudas sobre la credibilidad de la CBI.
Esto no es una novedad:
Greenpeace ha denunciado desde hace años
que Japón intercambiaba la ayuda financiera
para el desarrollo de países pobres
por votos a favor de la cacería comercial
de ballenas dentro de la CBI.
Recientemente, uno de los
miembros de la tripulación ballenera
que filtró información a dos
activistas de Greenpeace, Junichi Sato y Toru
Suzuki, ha confirmado lo que se sospechaba
desde hace años: que Japón compra
los votos de algunos países a los que
promete ayuda financiera para el desarrollo,
con tal de que voten a favor de la caza de
ballenas en la CBI.
La segunda polémica
es que Junichi y Toru pueden enfrentarse a
18 meses de cárcel por denunciar que
Japón malversa fondos públicos
financiando la supuesta “caza científica”
de ballenas en el Santuario Ballenero y que
existe tráfico ilegal de carne de ballena
que acaba en los platos de muchos restaurantes.
A falta de consenso científico,
en las reuniones previas a esta cumbre, el
presidente de la CBI, Cristián Maqueira,
ha presentado una propuesta donde se plantea
que se reabra la caza de cetáceos para
mejorar los vacíos legales presentes
en la moratoria firmada en 1986. Esto sería
un grave retroceso.
Activistas de Greenpeace
Italia protestan en contra de la compra de
votos, por parte de Japón, en la reunión
de la Comisión Ballenera Internacional.
Esta reunión es decisiva para determinar
la conservación de los cetáceos.
Greenpeace se opone a cualquier tipo de caza
comercial de cetáceos y pide que en
esta reunión, la CBI se modernice para
convertirse en un organismo que de una vez
por todas proteja a estos grandes mamíferos.
Si se levanta la moratoria aun con cuotas
bajas, puede afectar gravemente a estos mamíferos
marinos en muy pocos años. Pew, WWF
y Greenpeace han presentado una propuesta
que contiene seis puntos fundamentales que
han de ser aprobados para que esta cumbre
tenga un final positivo para el futuro de
las ballenas:
•el fin de la caza de ballenas
en el Santuario Ballenero Austral
•el fin del comercio con carne o productos
derivados de ballenas
•la eliminación de las cuotas unilaterales
de caza de ballenas en peligro de extinción
asumidas por algunos países
•el establecimiento de la ciencia como la
base para las decisiones tomadas por la CBI
•la vigilancia del no cumplimiento de los
acuerdos asumidos por países miembros
de la CBI
•fin a la caza de especies cetáceos
amenazadas y/o en peligro
La CBI lleva décadas estancada en el
debate sobre si debe o no existir la caza
comercial de ballenas debido a que Japón,
Noruega e Islandia se negaron a firmar la
moratoria en 1986. Desde entonces estos países
establecieron sus cuotas de captura de cetáceos
de manera unilateral, con fines comerciales,
mintiendo descaradamente como Japón,
que alega una supuesta caza “científica”.
Este 2010, que es el Año Internacional
para la Diversidad Biológica, es una
oportunidad única para transformar
la CBI y eliminar de manera progresiva la
caza comercial que aún queda.
Cualquier acuerdo que se
presente en la CBI debe respetar la prohibición
de la caza comercial de ballenas, y México
debe impulsar también esta postura.
Es necesario que los políticos que
están en Agadir tomen decisiones arriesgadas
y que acaben con la mala gestión de
la CBI. La reunión en Agadir puede
y debe salvar ballenas.
+ Más
¡Urge actuar contra
el cambio climático!
Reportaje - junio 24, 2010
Greenpeace presentó el documento México
ante el cambio climático Evidencias,
impactos, vulnerabilidad y adaptación
que reúne las voces de 19 científicos
y expertos, quienes documentan la elevada
vulnerabilidad de nuestro país al cambio
climático, en términos tanto
sociales, económicos como ambientales
y alertan sobre la urgencia de que los tomadores
de decisiones actúen para enfrentar
este fenómeno.
En nuestro país, 15 por ciento del
territorio, 68.2 por ciento de la población
y 71 por ciento del Producto Interno Bruto
(PIB) se encuentran altamente expuestos a
impactos adversos directos del cambio climático,
y ante esta realidad, la indiferencia política
y la inacción son imperdonables.
"La idea de un clima
promedio con pequeñas variaciones normales
está o debiera estar en crisis. En
el mundo desarrollado, científicamente
ese concepto del clima ha pasado a la historia
para dar origen a una concepción del
clima basado en la teoría del caos,
de probabilidades, de física”, comenta
Cuauhtémoc León investigador
asociado del centro de especialistas en gestión
ambiental (CEGAM), en el documento. Ese caos
tendrá implicaciones para nuestros
ecosistemas. De acuerdo con los datos aportados
por los investigadores:
•el 21 por ciento de la
vegetación del país será
afectada negativamente a consecuencia del
cambio climático hacia 2020, escalando
a 53 por ciento para 2050
•los ecosistemas marinos como los arrecifes
se morirán debido a un aumento en la
acidificación de los océanos
y dejarán de proporcionar los servicios
ambientales que hoy ofrecen como proteger
las costas contra la fuerza de los huracanes
•la crisis del agua se agudizará, llegando
a casos extremos de escasez en el Valle de
México
•los impactos en la economía mexicana
podrían alcanzar hasta el 40 por ciento
del PIB para fines de siglo
•se ha observado que en el Distrito Federal,
Veracruz y Mexicali se han intensificado las
olas de calor en años recientes
•las demandas de la mayoría de los
conflictos ambientales de los pasados tres
años son por las siguientes causas:
tenencia de la tierra, 34 por ciento; defensa
de la biodiversidad,17 por ciento; en defensa
de bosques y selvas, 14 por ciento; contra
la contaminación generada por algún
particular, 13 por ciento; en denuncia de
actividades mineras y petroleras contaminantes,
10 por ciento y en defensa del agua y contra
su privatización, 10 por ciento
•los procesos migratorios a consecuencia de
cambios hidrometereológicos (sequías,
inundaciones o heladas) podrían aumentar,
por lo que se hace necesario comenzar a determinar
cuál es la proporción de potenciales
desplazados por estas causas
"La transformación ambiental a
gran escala, producto del impacto acumulativo
de las acciones humanas en el planeta, son
ya visibles en muchas partes. En México,
algunos de los impactos más visibles
y directos del cambio ambiental global se
notan en los ecosistemas costeros, y en particular
en las lagunas de manglar y los arrecifes
coralinos. El ascenso del nivel del mar está
ya claramente ocurriendo en nuestras costas,
impactando lagunas costeras y manglares, y
continuará aceleradamente en el futuro”,
expresó Exequiel Ezcurra, director
del Instituto para México y Estados
Unidos de la Universidad de California.
Greenpeace presenta una
buena recopilación sobre los impactos
del cambio climático en México,
logrando conjuntar investigadores de diversas
instituciones y miembros de organizaciones
no gubernamentales con amplia experiencia
en temas socio ambientales. Este esfuerzo,
resulta no sólo útil para acercar
a la sociedad y a la academia, sino que permite
un seguimiento público de temas que
requieren de la atención de amplios
grupos de población, comentó
la directora del Centro de Ciencias de la
Atmósfera de la UNAM, Amparo Martínez.
Al respecto, Andrés
Flores, director de investigación sobre
cambio climático del Instituto Nacional
de Ecología (INE) advirtió que
"no podemos quedar inmóviles ante
las abundantes e incontrovertibles evidencias
de los impactos pasados, presentes, y sobre
todo futuros del cambio climático en
nuestro país. Tenemos una base científica
suficiente para fundamentar acciones más
decididas, para lo cual los autores de este
documento nos dan muchas y muy buenas ideas
sin quedarse, ni mucho menos, en el puro diagnóstico".
México ante el cambio
climático es un documento de lectura
obligada para todos aquellos interesados en
este tema pero sobre todo para los tomadores
de decisiones en nuestro país, coincidió
Beatriz Bugeda, presidenta del Observatorio
Ciudadano de Vigilancia Ambiental (OCVA),
quien recalcó que la decimo sexta cumbre
mundial de la Convención Marco de Naciones
Unidas sobre Cambio Climático (COP16)
que tendrá lugar en Cancún,
México en diciembre de este año
es una nueva oportunidad para la comunidad
internacional de formalizar un acuerdo global,
justo, ambicioso y obligatorio que responda
a las expectativas de miles de millones de
habitantes de este planeta.
"El cambio climático
es un problema que amenaza la vida tal como
hoy la conocemos por lo que es imperativo
que las autoridades actúen frente a
este fenómeno y todas las razones para
ello están reunidas en este documento
que aporta material para la reflexión,
pero sobre todo, para acabar con la indiferencia
política y mover a la acción
a las autoridades", señaló
Patricia Arendar, directora ejecutiva de Greepeace
México.
Dicha acción debe
materializarse en políticas públicas,
presupuestos claros, en dinero, a través
de un fondo de adaptación dirigido
a minimizar los impactos en los sectores más
vulnerables, sean ecosistemas o comunidades
de personas y en el caso de México
ese dinero no puede ser menor al 1 por ciento
del PIB", concluyó Arendar.