Mientras mañana (2
de febrero) se celebra el Día Mundial
de los Humedales en
el Año de los Bosques, Greenpeace,
mediante un comunicado público denunció
que de aprobarse el texto del proyecto sobre
la creación del Servicio de Biodiversidad,
ingresado al Senado en enero, se permitiría
legalmente la tala “legal” de los bosques
nativos en el país.
Además de sumarse
a las críticas por falta de participación
social en la propuesta enviada al Congreso
por el Ejecutivo, Greenpeace destaca que este
hecho se produce justamente al inicio del
Año Internacional de los Bosques (2011),
declarado por las Naciones Unidas, que incluye
una serie de actividades destinadas a generar
mayor conciencia de que los bosques son parte
integral del desarrollo sostenible del planeta
debido a los beneficios económicos,
socioculturales y ambientales que proporcionan.
Para la organización
medioambiental, la promulgación de
este proyecto “implicaría un retroceso
inmediato de la ley 20.283 sobre recuperación
del bosque nativo y al suspender y flexibilizar
las prohibiciones que aplican como protección
a especies vegetales nativas clasificadas
"en peligro de extinción"
-entre otras- que formen parte de un bosque
nativo, como asimismo la alteración
de su hábitat”. Esto, constituye, para
Greenpeace, “un contrasentido respecto del
objetivo al que apunta el Ministerio de Medio
Ambiente”.
Su denuncia está
basada en el texto del artículo N°57
sobre competencia sectorial sobre especies
amenazadas, protegidas por ley, que señala
que: “el plan de recuperación, conservación
o gestión de una especie nativa de
aquellas a que se refiere el artículo
19° de la ley N° 20.283, clasificada
en una de las categorías de amenaza
a que refiere el inciso primero del artículo
anterior, podrá permitir la corta,
eliminación, destrucción o descepado
de individuos de dichas especies y la intervención
o alteración de su hábitat,
haciendo inaplicables las prohibiciones establecidas
en dicho artículo, en la medida que
se dé cumplimiento a las obligaciones
que el mismo plan disponga”.
Junto a su denuncia, Greenpeace
solicita al gobierno “que responda con transparencia
y de cara a la ciudadanía respecto
de éste y otros puntos del anteproyecto
de ley que finalmente se decidió a
puerta cerrada”.
El comunicado agrega “Si
bien el documento contiene un número
importante de puntos que pueden dar pié
a un avance en materia de protección
del medio ambiente, y que es necesario discutir
en atención a las críticas surgidas
desde diversas organizaciones que ya han tenido
acceso al texto legal, el que contenga estas
modificaciones legales hace dudar de la integridad
que ofrece”.
“Es de esperar que en los
próximos días, con la publicación
del documento en los portales correspondientes,
se rectifique este error o se declare explícitamente
cuál es el espíritu que se desea
imponer en materia de protección de
la biodiversidad nacional” finaliza Greenpeace.