Respuesta de la organización
al escape radiactivo en el reactor nuclear
de Fukushima
En esta página Reportaje - marzo 12,
2011
Ante la evidencia de
que partículas radiactivas, entre ellas
isótopos de Cesio-137, han sido liberadas
por la central nuclear de Fukushima, y de
que se han detectado altos niveles de radiación
en las inmediaciones de la central, Greenpeace
muestra su preocupación porque se produzca
un accidente con fusión del núcleo.
“Nuestros pensamientos siguen
estando con la población japonesa que
se enfrenta a la amenaza de un desastre nuclear,
después de sufrir un terremoto y un
tsunami devastadores. Las autoridades deben
centrarse en mantener a la gente a salvo y
en evitar más escapes de radiactividad”,
Jan Beranek, director de la campaña
nuclear de Greenpeace Internacional, ha manifestado
Greenpeace señala
que Fukushima continúa bajo grave peligro
de fusión del núcleo. Esto potencialmente
podría crear una nube radiactiva de
yodo, que propagaría altos niveles
de radiación al medio ambiente y a
la población en un radio de decenas
de kilómetros de distancia. La organización
recuerda que simplemente advirtiendo a la
población local de la importancia de
permanecer dentro de los edificios, el Gobierno
puede limitar las dosis de radiación
recibidas por esta nube en un factor de 2
a 5.
“No está nada claro
cómo va a evolucionar la situación
en Fukushima, pero lo que nosotros sabemos
es que la contaminación por escape
de Cesio-137 supone un elevado riesgo para
la salud de la población expuesta a
ello. El Cesio-137 es uno de los tipos de
isótopos que han causado mayor daño
a la salud después del desastre de
Chernóbil, porque se mantiene en el
medio ambiente y en la cadena alimentaria
durante 300 años”, ha añadido.
"¿Cuántas
más advertencias necesitamos para entender
que hay un peligro inherente a la explotación
de la energía nuclear? La industria
atómica siempre nos dice que estos
sucesos no pueden ocurrir en reactores modernos,
sin embargo, ahora Japón se encuentra
en medio de una crisis nuclear con efectos
potencialmente devastadores. La energía
nuclear, siempre será vulnerable a
la combinación potencialmente mortal
de un error humano, fallos de diseño
y desastres naturales" ha declarado Jan
Beranek, responsable de la campaña
de energía nuclear de Greenpeace Internacional.
Greenpeace pide el cierre
de los reactores nucleares existentes, y el
abandono de todo proyecto de construcción
de nuevos reactores nucleares comerciales.
Los gobiernos deben invertir en energías
renovables que, al contrario de la nuclear,
son sostenibles, seguras, asequibles y fiables.
Notas:
Japón cuenta con
54 rectores nucleares repartidos en 18 centrales.
Suman 47.000 MW de capacidad instalada y generan
el 29% de la electricidad (datos de 2010).
El terremoto y tsunami han
afectado a cuatro centrales nucleares situadas
en la costa oriental de Japón, en la
zona más cercana al epicentro: Onagawa
(tres reactores), Fukushima-Daiichi (6 reactores),
Fukushima-Daini (4 reactores) y Tokai (un
reactor). La central nuclear más cercana
a éstas es la de Kashiwazaki-Kariwa
(7 reactores) y se encuentra en el lado opuesto
de la isla, en su costa occidental.
Para más información
sobre cómo Japón podría
eliminar gradualmente la energía nuclear
para el año 2045, consultar el informe
de Greenpeace Escenario de [R]evolución
Energética en Japón (en inglés).
http://www.energyblueprint.info/japan.0.html
+ Más
Greenpeace muestra su preocupación
porque se produzca un accidente con fusión
del núcleo en Fukushima
Respuesta de la organización
al escape radiactivo en el reactor nuclear
de Fukushima
Ante la evidencia de que partículas
radiactivas, entre ellas isótopos de
Cesio-137, han sido liberadas por la central
nuclear de Fukushima, y de que se han detectado
altos niveles de radiación en las inmediaciones
de la central, Greenpeace muestra su preocupación
porque se produzca un accidente con fusión
del núcleo.
“Nuestros pensamientos siguen
estando con la población japonesa que
se enfrenta a la amenaza de un desastre nuclear,
después de sufrir un terremoto y un
tsunami devastadores. Las autoridades deben
centrarse en mantener a la gente a salvo y
en evitar más escapes de radiactividad”,
Jan Beranek, director de la campaña
nuclear de Greenpeace Internacional, ha manifestado
Greenpeace señala
que Fukushima continúa bajo grave peligro
de fusión del núcleo. Esto potencialmente
podría crear una nube radiactiva de
yodo, que propagaría altos niveles
de radiación al medio ambiente y a
la población en un radio de decenas
de kilómetros de distancia. La organización
recuerda que simplemente advirtiendo a la
población local de la importancia de
permanecer dentro de los edificios, el Gobierno
puede limitar las dosis de radiación
recibidas por esta nube en un factor de 2
a 5.
“No está nada claro
cómo va a evolucionar la situación
en Fukushima, pero lo que nosotros sabemos
es que la contaminación por escape
de Cesio-137 supone un elevado riesgo para
la salud de la población expuesta a
ello. El Cesio-137 es uno de los tipos de
isótopos que han causado mayor daño
a la salud después del desastre de
Chernóbil, porque se mantiene en el
medio ambiente y en la cadena alimentaria
durante 300 años”, ha añadido.
"¿Cuántas
más advertencias necesitamos para entender
que hay un peligro inherente a la explotación
de la energía nuclear? La industria
atómica siempre nos dice que estos
sucesos no pueden ocurrir en reactores modernos,
sin embargo, ahora Japón se encuentra
en medio de una crisis nuclear con efectos
potencialmente devastadores. La energía
nuclear, siempre será vulnerable a
la combinación potencialmente mortal
de un error humano, fallos de diseño
y desastres naturales" ha declarado Jan
Beranek, responsable de la campaña
de energía nuclear de Greenpeace Internacional.
Greenpeace pide el cierre
de los reactores nucleares existentes, y el
abandono de todo proyecto de construcción
de nuevos reactores nucleares comerciales.
Los gobiernos deben invertir en energías
renovables que, al contrario de la nuclear,
son sostenibles, seguras, asequibles y fiables.
Notas:
Japón cuenta con
54 rectores nucleares repartidos en 18 centrales.
Suman 47.000 MW de capacidad instalada y generan
el 29% de la electricidad (datos de 2010).
El terremoto y tsunami han
afectado a cuatro centrales nucleares situadas
en la costa oriental de Japón, en la
zona más cercana al epicentro: Onagawa
(tres reactores), Fukushima-Daiichi (6 reactores),
Fukushima-Daini (4 reactores) y Tokai (un
reactor). La central nuclear más cercana
a éstas es la de Kashiwazaki-Kariwa
(7 reactores) y se encuentra en el lado opuesto
de la isla, en su costa occidental.
Para más información
sobre cómo Japón podría
eliminar gradualmente la energía nuclear
para el año 2045, consultar el informe
de Greenpeace Escenario de [R]evolución
Energética en Japón (en inglés).
http://www.energyblueprint.info/japan.0.html