La Eurocámara refuerza
la propuesta legislativa que endurece las
normas de aprobación y cultivo de OMG
Julio 6, 2011 - Greenpeace aplaude la decisión
del Parlamento Europeo a favor de fortalecer
un proyecto de ley de la Unión Europea
(UE) que otorga a los Estados miembros
mayor capacidad para prohibir el cultivo organismos
modificados genéticamente (OMG) en
sus territorios. El Parlamento Europeo respalda
de este modo que consumidores, agricultores
y medio ambiente deben ser protegidos de manera
más eficaz frente a los OMG y que todos
los impactos de su cultivo han de ser tenidos
en cuenta en la toma de decisiones.
De este modo, el Parlamento
se suma a la mayoría de los ciudadanos
europeos, quienes se oponen a los cultivos
transgénicos y permanecen profundamente
preocupados por el creciente aval científico
existente sobre los riesgos para la salud
y el medio ambiente.
"Con la votación
de ayer, el Parlamento ha dado un empujón
definitivo a los proyectos legislativos cuya
finalidad es proteger nuestra agricultura
y nuestra alimentación. Sin embargo,
no olvidemos que la contaminación genética
no respeta fronteras, y que las prohibiciones
nacionales no son un sustituto de las evaluaciones
de impacto y de los estudios de seguridad
rigurosos a nivel europeo, algo que la UE
por el momento no está llevando a cabo”,
ha afirmado Juan-Felipe Carrasco, responsable
de la campaña de Agricultura y Transgénicos
de Greenpeace.
El Parlamento Europeo votó
a favor de:
-Un respaldo jurídico
más sólido para las prohibiciones
nacionales. Concretamente el cambio de la
base jurídica basada en los artículos
del Tratado de Funcionamiento de la UE relacionados
con el Mercado Interno a los artículos
sobre Medio ambiente.
-El reconocimiento de que
se pueden basar las prohibiciones en motivos
ambientales concretos, incluyendo el desarrollo
de hierbas resistentes a herbicidas y efectos
sobre la biodiversidad.
-Medidas obligatorias para
evitar la contaminación en todos los
países de la UE.
-Sistemas de responsabilidad civil obligatorios
para los casos de contaminación, si
fallan las medidas para evitar la contaminación.
-Evaluaciones regionales
y nacionales de riesgo ambiental, complementariamente
a la evaluación realizada a nivel europeo;
posibilidad de prohibir los cultivos transgénicos
a nivel regional.
-Posibilidad de prohibir
transgénicos cuando la falta de información
está impidiendo que se realicen estudios
de seguridad completos. Las empresas semilleras
manejan sin transparencia la información
sobre sus productos. La decisión de
hoy permitiría obligar a las empresas
biotecnológicas a dar acceso al material
necesario para la investigación independiente
sobre los riesgos de los OMG.
-Una nueva llamada a la
Comisión Europea para que se aplique
plenamente la decisión unánime
del Consejo de Medio Ambiente (diciembre de
2008) para que los estudios sobre la seguridad
de los OMG a nivel Europeo y la evaluación
de riesgos sean grandemente mejorados.
-El principio de precaución
sea asumido plenamente en el derecho a prohibir
el cultivo de OMG.
“Ahora la Comisión
Europea y los gobiernos nacionales tienen
la última palabra y la responsabilidad
de asegurarse de que se mantienen las cláusulas
de salvaguardia (moratorias) contra los cultivos
transgénicos en aquellos países
que, a diferencia de España, han optado
desde hace años por prohibir estos
peligrosos cultivos”, ha añadido Carrasco.
Cabe destacar que mientras
los europarlamentarios del PP han votado en
contra de la mayor parte de los puntos de
la propuesta, los del PSOE los han apoyado
prácticamente todos, una postura contradictoria
con la política a favor de los cultivos
transgénicos del actual Ejecutivo.
España sigue siendo el único
país de la UE en el que se cultivan
OMG a gran escala, mientras la agroecología
y la agricultura sostenible son la única
respuesta correcta a los desafíos de
seguridad alimentaria, cambio climático
y productividad a largo plazo.