Julio
8, 2011 - Bruselas. El Parlamento Europeo
votó a favor para fortalecer un proyecto
de ley de la Unión Europea (UE) que
brinda a los estados miembro el derecho de
prohibir que se cultiven en sus territorios
cultivos genéticamente modificados
(GM).
Greenpeace aplaude el voto del Parlamento
Europeo y urge al gobierno mexicano a no seguir
el camino de cerrazón de autorizar
cultivos transgénicos en la cuna del
maíz.
“Mientras la Unión
Europea avanza en la implementación
de medidas de bioseguridad respecto a los
cultivos transgénicos, el gobierno
mexicano con la escalada de autorizaciones
para liberar al medio ambiente cultivos transgénicos
que ha venido otorgando, abre cada vez más
la puerta a la contaminación de la
gran diversidad de maíces nativos de
nuestro país”, acusó Aleira
Lara, coordinadora de la campaña de
agricultura sustentable y transgénicos
de Greenpeace.
“Una creciente mayoría
de la población se preocupa cada vez
más por los impactos negativos al medio
ambiente y los posibles riesgos a la salud
humana de los cultivos transgénicos.
La agricultura ecológica es la alternativa
correcta a los desafíos de la seguridad
alimentaria, cambio climático y la
productividad a largo plazo”, denunció
la organización.
"Hoy el Parlamento
Europeo ha dado un verdadero impulso al proyecto
de ley para proteger nuestros cultivos y alimentos.
Pero no olvidemos que la contaminación
transgénica no respeta fronteras. Las
prohibiciones nacionales no son un sustituto
a las pruebas de laboratorio de seguridad
a nivel europeo, algo que la UE ha dejado
de hacer hasta ahora”, declaró Stefanie
Hundsdorfer, asesor sobre política
agrícola de Greenpeace UE.
Greenpeace celebra que el
Parlamento Europeo haya votado a favor de:
•Fortalecer el proyecto
de ley de prohibición de cultivos GM
reconociendo sus impactos al medio ambiente,
incluyendo el desarrollo de malezas resistentes
a herbicidas y sus impactos en la biodiversidad.
•Permitir la prohibición cuando la
falta de información no permite una
experimentación segura.
•Modificación de la base jurídica
para que cualquier prohibición basada
en motivos medioambientales pueda ser llevada
a tribunales.
•Obligar a las empresas biotecnológicas
a dar acceso al material necesario para la
investigación independiente sobre los
riesgos de los organismos genéticamente
modificados (OGM).
•Que todos los países tomen medidas
obligatorias contra la contaminación
transgénica. En caso de que estas medidas
fallen, el comité vote a favor de que
los gobiernos garanticen que los responsables
de los daños de contaminación
paguen.
•Llamar de nuevo a la Comisión Europea
para que está a su vez llame por unanimidad
a los ministros de medio ambiente para mejorar
las pruebas de seguridad de los cultivos transgénicos
a nivel europeo.
•Asegurar que el principio de precaución
se inserte en el derecho de prohibición.
•Dar a las regiones el derecho de prohibir
los cultivos GM.
La ley aún requiere la aprobación
de una mayoría cualificada de los estados
miembros.
+ Más
Sabotean países balleneros
creación de santuario del Atlántico
sur
Julio 14, 2011 - Con un
boicot llegó a su fin la 63a reunión
anual de la Comisión Ballenera Internacional
(CBI), luego de que las naciones que promueven
la caza de ballenas abandonaran la reunión
en la que se votaría por la creación
del santuario del Atlántico Sur.
Jersey, Reino Unido. Países
como Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa
Rica, Ecuador, Guatemala, México, Nicaragua,
Panamá, Perú y Uruguay han esperado
una década para la creación
de este santuario, que ha vuelto a ser bloqueado
por Japón y sus aliados como Islandia,
Rusia, Camerún, Palau y las islas St
Kitts.
Pero no todo está
perdido. Ayer, la CBI adoptó nuevas
reglas para suspender el pago en efectivo
de cuotas de los países afiliados,
lo que se espera se traducirá en una
nueva era de transparencia de la Comisión.
La decisión de prohibir los pagos en
efectivo significa que por fin dentro de la
CBI será más difícil
que las naciones que promueven la cacería
compren votos. Este es el primer paso para
lograr que la CBI trabaje por las ballenas
y no por los balleneros.
Greenpeace ha denunciado
desde hace años que Japón intercambia
su ayuda financiera para el desarrollo hacia
países pobres por votos a favor de
la cacería comercial de ballenas dentro
de la CBI. Esto volvió a demostrarse
hoy, por ello, el transparentar los procesos
dentro de la comisión es un avance
sustancial para evitar boicots en un futuro
y contar con un santuario ballenero del Atlántico
Sur.
A principios de esta semana,
el Tribunal Superior de Sendai rechazó
la apelación de dos activistas de la
organización, que fueron condenados
en septiembre de 2010 por "robo y "apropiación
indebida" de una caja de carne de ballena
que se usó como evidencia para denunciar
el tráfico y malversación de
fondos a gran escala en la industria ballenera
japonesa.
Este caso fue denunciado
en 2008 pero la justicia japonesa lo ha desestimado
y prefiere condenar a dos activistas que abrir
una investigación por tráfico
y malversación de fondos a gran escala
en la industria ballenera japonesa.