Amsterdam, 2 de marzo de
2012 — Un juez federal
de Alaska rechazó hoy la mayor parte
de una demanda realizada por la Shell Oil
Company contra Greenpeace Estados Unidos que
podría haber sido una de las más
amplias y restrictivas en la historia legal
de los Estados Unidos.
Después de que, la
semana pasada, siete activistas de Greenpeace
Nueva Zelanda, incluyendo a la actriz Lucy
Lawless, ocuparan el barco perforador Discoverer
Noble contratado por Shell, la petrolera lanzó
un ataque legal que pretende silenciar la
oposición de la organización
a sus controversiales planes de perforar en
los mares de Chukchi y Beaufort en las costas
de Alaska.
La orden de restricción
original propuesta por Shell el 24 de febrero
en una corte de Alaska, podría haber
sido aplicada a cualquiera de los 500.000
subscriptores por e-mail de Greenpeace Estados
Unidos que eligieran realizar acciones contra
la organización en estaciones de servicio,
oficinas regionales u otros locales en el
país.
“Shell está intentando
intimidar y silenciar cualquier voz que se
oponga a sus planes irresponsables de excavar
las aguas heladas de Alaska”, declaró
Ben Ayliffe, responsable de la campaña
del Ártico en Greenpeace Internacional.
“Esto no nos sorprende para nada, dado el
hecho de que la flota perforadora de la empresa
es vieja, está compuesta por naves
oxidadas con muchísimos agujeros y
que su plan de respuesta parece sacado de
una novela de fantasía. Pero Greenpeace
y más de 220 mil personas que apoyan
nuestra causa no seremos silenciados e iremos
a la corte si hace falta”.
El juez rechazó el
pedido de Shell declarándolo demasiado
amplio y, en cambio, dictó una orden
más acotada que se aplica a las dos
naves perforadoras de la empresa, la plataforma
Kulluk y el Discoverer Noble. En su decisión,
la jueza Gleason escribió: “Shell no
pudo demostrar la necesidad de una restricción
tan amplia en este momento”.
Como respuesta a la noticia,
el vice director de campañas de Greenpeace
Estados Unidos, Dan Howells declaró:
“La justicia rechazó la mayor parte
de la demanda de Shell, pero todavía
quedan acusaciones en pie. Este fue uno de
los ataques más importantes que hemos
visto en los últimos años contra
nuestras protestas pacíficas y, así
y todo, queda una orden de alejamiento en
contra de una organización pacífica
que ni siquiera estuvo involucrada en las
acciones que protesta Shell. La amenaza real
al país no viene de aquellos que se
manifiestan de forma pacífica, sino
de una petrolera irresponsable que quiere
perforar las heladas aguas de Alaska corriendo
el riesgo de contaminar la costa, devastar
las comunidades locales y causar estragos
en el clima”.
Para sustentar su reclamo,
Shell hizo referencia a una actividad realizada
casi a 10.000 kilómetros de Alaska,
en la que activistas de Greenpeace Nueva Zelanda
se sumaron a la actriz Lucy Lawless para detener
un barco perforador de Shell que partía
hacia el Ártico.
“Más de 220.000 personas
de todo el mundo sumaron su apoyo a Greenpeace
para proteger el Ártico y defender
nuestras acciones, exigiéndole a Shell
que cancele sus planes de perforaciones en
el Ártico durante el verano”, dijo
Ayliffe. “Esto va más allá de
Greenpeace. Shell también está
intentando silenciar a los cientos de miles
de ciudadanos de todo el mundo que piensan
como nosotros. Esta es una violación
a nuestro derecho de libre expresión
y de manifestación pública pacífica”.
Sumate vos también.
Exigile a Shell que no destruya el Ártico.
Hacé click aquí
Nota:
-Esta orden propuesta está
separada de otra demanda, que intenta prevenir
una auditoría a los planes de respuesta
de Shell ante un derramede petróleo
en el ártico, que involucra también
a otros grupos ambientales.
Esta orden de restricción
tiene una duración de 14 días,
a menos que sea extendida por la corte. El
14 de marzo a las 9:00, en Alaska, se realizará
una audiencia por una moción de Shell
para obtener una medida más permanente.
+ Más
“Nombramiento de Del Campo
en Energía es un claro guiño
a Castilla”
Matías Asun afirmó
que “su pasado reciente como lobbista termoeléctrico
ya hacía poco recomendable su presencia
como subsecretario”.
Agregó que “evidentemente no es casual
que se le nombre en el cargo justo cuando
el Gobierno ha pretendido presionar a la Corte
Suprema para salvar Castilla”.
El director ejecutivo de Greenpeace Chile,
Matías Asun, manifestó su preocupación
por el nombramiento como ministro subrogante
de Energía de Sergio del Campo, quien
hasta ahora era subsecretario de la cartera.
Asun indicó que “la
salida de Rodrigo Álvarez y el nombramiento
de Del Campo ocurren mientras se definirá
el futuro de la energía en Chile y
los costos que la sociedad deberá pagar.
A ello se deben las declaraciones del Ministerio
de Energía, específicamente
del en ese entonces subsecretario Del Campo,
en el sentido de que el paso de Castilla a
la Corte Suprema era un “obstáculo”
para el desarrollo de inversiones. Con esa
afirmación, poca importancia tienen
los derechos legítimos de todo ciudadano
de exigir que en Chile se respete la Ley”.
Asun afirmó que “Del
Campo ya había sido mencionado como
otro caso explicativo del llamado gobierno
de los empresarios. En su caso, los lazos
estrechos y recientes que lo atan a la industria
termoeléctrica ya suponían una
pésima señal para que ejerciera
un cargo tan sensible como la subsecretaría”.
A juicio de la cabeza de
Greenpeace Chile “dado el modo concertado
en que distintos personeros del Gobierno han
defendido públicamente a Castilla,
y en el entendido de que la presencia de Del
Campo en Energía siempre ha sido una
señal, hay que leer su nombramiento
como un guiño más a favor del
proyecto, con el objetivo de ejercer una presión
ilegítima sobre la Corte Suprema, donde
se tomará la decisión final”.
Para el director de Greenpeace
“la imprudencia del ex subsecretario Del Campo
es muy coherente con la política de
este gobierno. Hay que recordar que lo que
“falló” en la aprobación de
la central fue la calificación favorable
que inexplicablemente diera el entonces Seremi
de Salud para agilizar las cosas”.
Asún indicó
que “es importante que la opinión pública
en conocimiento de la situación del
nuevo ministro. No queremos que el sillón
del ministro de Energía se transforme
en una silla eléctrica”.
Finalmente, indicó
que “el tema energético se ha vuelto
tan relevante que dos ministros han caído
recientemente por alzamientos sociales. Si
a ello se suma que estamos viviendo semanas
claves en el sector, lo que corresponde es
que el Gobierno nombre a un ministro titular
para tener a un interlocutor válido
y con atribuciones”.